Inflación y falta de respuestos hunde a transportistas en la miseria

Inflación y falta de respuestos hunde a transportistas en la miseria

Foto La verdad
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La mendicidad le tocó la puerta a los choferes del transporte público en Maracaibo. Al menos 30 mil profesionales del volante, de 40 mil que existían, se han visto obligados en el último año a buscarle otra “salida” a la vida, reseña La Verdad.

Vender frutas en un semáforo, limpiar vidrios o recoger basura en una carretilla, son algunas de las actividades económicas a las que han tenido que migrar choferes de carritos por puesto, busetas, vans y autobuses, luego de que el sustento de su familia durante décadas (su carro) se quedara varado.





Pedir “una muela”, es decir una colaboración a sus compañeros en la paradas de la ciudad se convirtió en la opción más vergonzosa de “los hombres de hierro”, como son conocidos los profesionales del volante en Maracaibo.

Hace más de dos meses que Carlos Castillo, chofer de la línea El Mamón dejó de trabajar. “Primero fue el arranque, después el alternador y ya por último me comenzó a fallar la batería. ¿De dónde saca uno?”. Con evidente tristeza, Castillo dijo: “Me tocó deshuesar el carro y venderlo por partes. No le hice mucho pero me alcanzó para comer unos días”, relató el hombre en la parada de su antigua línea mientras esperaba a un compañero que siempre lo ayu