La actividad demoníaca en el mundo está aumentando, advierten exorcistas

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Hay un aumento alarmante en la actividad demoníaca que está siendo reportado por quienes trabajan en el ministerio de exorcismo, así lo indicó el P. Vincent Lampert, exorcista y párroco en la Arquidiócesis de Indianápolis en Estados Unidos, reseña AciPrensa.

En entrevista con National Catholic Register el exorcista alertó que observa un número creciente de personas involucradas en rituales satánicos y que se disponen al mal; y aunque se están tomando medidas para aumentar el número de exorcistas, la demanda sigue superando la oferta.





“El problema no es que el diablo haya aumentado su juego, sino que más gente está dispuesta a jugarlo”, dijo P. Lampert señalando directamente la pornografía desenfrenada, el uso de drogas ilegales y el ocultismo como algunas de los caminos por donde ingresa el demonio en la vida de las personas.

El P. Lampert asistió a Roma en octubre de 2016 a la reunión de la Asociación Internacional de Exorcistas, en la que participaron unos 400 líderes y sacerdotes católicos. Tras el evento, el presbítero aseguró que los participantes estaban de acuerdo en que hay una gran necesidad de designar más exorcistas.

Además, explicó que si bien las posesiones demoníacas reales “son raras” y que solo ha visto tres en los últimos tres años, lo que ve con más frecuencia son otros tres fenómenos: infestación, vejación y obsesión.

La infestación demoníaca sucede en lugares donde las cosas pueden moverse y hay ruidos fuertes.
La vejación se refiere al evento en el que una persona es atacada físicamente y puede presentar marcas como moretones, mordeduras o arañazos.
La obsesión demoníaca implica ataques mentales, como por ejemplo pensamientos persistentes del mal.

Mons. John Esseff, Presidente de la junta directiva del instituto y uno de los miembros fundadores, explicó que “a medida que la aceptación del pecado ha aumentado, también aumenta la actividad demoníaca”.

“Los obispos veían la necesidad de más exorcistas entrenados debido a la cantidad de casos que eran enviados de todo el país a las diócesis que contaban con exorcistas”.