El gobierno de Nicolás Maduro hizo un cálculo de estrategia emocional para desmotivar al pueblo venezolano que le revirtió. Es decir, pensaron que con la imposición a través del Consejo Nacional Electoral a los partidos políticos para relegitimar sus siglas partidistas, iban a lograr su objetivo macabro de aniquilar la democracia y la pluralidad política, pero este bravo pueblo ha salido con muchos bríos a plasmar su firma por el rescate del estado de derecho y libertades consagrados en la Constitución Nacional.
Nuestro bravo pueblo no sólo ha querido validar a las distintas organizaciones políticas de su preferencia, sino que en un mensaje claro y preciso, le están diciendo a Nicolás Maduro que no puede seguir postergando en el tiempo, la convocatoria a un proceso electoral, ya que por la vía cívica y pacífica, la gran mayoría quiere decidir el futuro político de nuestro país.
La única salida a esta grave crisis política, económica y social, donde el 82% de la población está en estado de pobreza y muriendo de hambre, tiene que ser el cambio de modelo político, porque por años se enquistaron en el poder para corroer y destruir todo a su paso, ni siquiera derechos fundamentales consagrados en la Carta Magna como son la alimentación y la salud, fueron honrados por la revolución.
El retardo en la convocatoria a un proceso electoral se le está convirtiendo a Nicolás Maduro en una bomba de tiempo, porque cada día su gobierno está más sólo y arrinconado, ni siquiera goza de credibilidad en los sectores más vulnerables de la población, que en algún momento creyeron en un proceso revolucionario que resultó ser un espejismo.
Nuestro pueblo es muy sabio, y hay que saber leer entre líneas, esa masiva participación de la gente en la validación de los partidos políticos, se traduce en una exigencia al Consejo Nacional Electoral y a la cúpula militar cívica de este desgobierno, de que se convoque un proceso electoral en la inmediatez, y no se le siga dando largas a la necesidad de una salida a esta profunda crisis a través de las elecciones.
Una y mil veces lo hemos dicho al país, desde la unidad democrática estamos dispuestos a poner todos los cargos de elección popular, incluyendo los de diputados a la Asamblea Nacional a la orden del país, si Maduro deja el culillo y se cuenta como un varón, porque todo ese seudo apoyo que dice tener, es sólo un mito y una táctica dilatoria para mantenerse en el poder a como de lugar.
Nicolás Maduro está en un proceso agonizante de su gobierno, porque el hambre, la miseria, la mendicidad y el estado de mengua en que nos encontramos, son un detonante contra una cúpula que durante años humilló y arruinó a un país en su conjunto, enjuagándose la boca con las necesidades del pueblo y vendiéndose como los salvadores de la patria, cuando en realidad han sido los protagonistas de la peor tragedia histórica jamás vivida en Venezuela.
Pues bien, Nicolás Maduro el tiro te salió por la culata, y esa estrategia burda de acabar con los partidos políticos se te revirtió a ti y a tu gobierno hampón, y hoy nuestro pueblo exige con contundencia la celebración de un proceso electoral, de lo contrario, atente a las consecuencias y a la tragedia social que podría estallar en cualquier momento.
Ismael García
Diputado a la Asamblea Nacional
Unidad Democrática Aragua
@ismaelprogreso