Asesinan en El Salvador a cuidadora de bebé que estuvo secuestrada

Relatives attend the funeral of Diana Lemus, 21, and her sister Yamileth, 7, who according to local media were kidnapped before their bodies were found, in San Salvador, El Salvador, March 25, 2017. REUTERS/Jose Cabezas
REUTERS/Jose Cabezas

 

Una mujer que cuidó a la bebé rescatada este sábado en El Salvador desde que fue secuestrada el pasado miércoles fue asesinada unas horas después de la liberación de la niña, en la misma casa donde permaneció al cuidado de la menor, informó hoy el director de la Policía Howard Cotto.

La víctima, identificada como Jacqueline Ortez, de 29 años, “ejerció estos días de cuidadora de la bebé, a petición de los pandilleros que la secuestraron”, después de asesinar, el pasado miércoles, a la madre y a una tía de la menor.





Ortez fue asesinada en la urbanización La Selva y Cotto no explicó cómo murió ni porque no fue detenida o protegida tras el rescate de la bebé, ni tampoco si hay sospechosos.

Según Cotto, la progenitora de la bebé y su tía, de 21 y 7 años, respectivamente, fueron asesinadas con tiros en la cabeza en la localidad de Nejapa, en el departamento de San Salvador.

Posteriormente, la bebé, de dos meses de edad, fue trasladada a una vivienda de la localidad de Ilopango (centro), donde estuvo retenida hasta este sábado, cuando “gracias a un operativo efectuado por tres delegaciones policiales, se rescató a la niña con vida y sin lesiones”.

El jefe del Cuerpo de Seguridad, quien señaló que hay tres personas en vías de investigación por este caso, informó que los agentes continúan buscando a un pandillero de la Barrio 18 ala revolucionarios “llamado Osvaldo Coronado, alias ‘Jocker’, encargado de conducir el vehículo que llevó a la menor que estuvo secuestrada”.

La madre de la niña, quien fue identificada como Lisbeth Lemus García, tuvo una expareja pandillero, actualmente en prisión, “que podría ser el padre de la bebé”, según explicó Cotto.

El Salvador registró un total de 524 mujeres asesinadas en 2016 y de estas al menos 41 murieron a manos de pandilleros de las facciones Revolucionarios y Sureños del Barrio 18 y Mara Salvatrucha (MS13).

De las más de 500 mujeres asesinadas en ese año, 87 eran pandilleras y 437 no eran “mareras”, pero tenían vínculos con las estructuras, a las que el Gobierno responsabiliza de la mayoría de homicidios, según información obtenida por Efe.

El país centroamericano es considerado uno de los más violentos del mundo por sus tasas de 103 y 81,7 homicidios por cada 100.000 habitantes en 2015 y 2016, respectivamente. EFE