En estos momentos de tanta susceptibilidad es importante tener presente que cada acto debe estar enmarcado en la transparencia y la comunicación efectiva.
La colectividad se encuentra enmarcada en una marcha para el 19A, dónde las expectativas se remontan en la salida definitiva del Presidente, independientemente de la posibilidad real de ésta salida. Cualquier actividad que ponga en riesgo este objetivo, será arduamente criticada y causará un daño irreparable en la confianza de los venezolanos.
El que representantes de la MUD asistan a reuniones no debería sorprendernos, lo que nos afecta es que no aprendan de los errores cometidos y sigan prestándose para generar caos en la sociedad. Esta reunión planificada en República Dominicana con representantes del Gobierno y mediadores debió ser informada sin ningún tipo de problemas, ya que entendemos que son necesarias siempre y cuando sean en beneficio de nuestro país. ¿Por qué hacerla al anonimato?, ¿Por qué comprometer la integridad de la MUD?, éstas son las interrogantes que se generan dentro de tanta confusión, en momentos tan claves como el que estamos viviendo.
Es el momento de que reine la transparencia, el respeto y la tolerancia, debemos entender que el radicalismo solo colabora al gobierno en sus actos, los venezolanos no podemos seguir siendo carne de cañón, es el momento de hablar claro y ante todo de cuidarnos unos a otros. Es inaceptable la doble moral y mucho menos tomar decisiones que afecten nuestra Democracia. Es vital recuperar espacios, debido a que es un derecho establecido en nuestra constitución, no confundamos mantener las protestas con recuperar los espacios y actuaciones que nos corresponden, aprendamos de los errores cometidos en el pasado y no permitamos que el extremo se adueñe de nuestro objetivo “Venezuela Libre”.