Hoy en Venezuela: Unidos desde el dolor, por María Gracia Cruz

Hoy en Venezuela: Unidos desde el dolor, por María Gracia Cruz

thumbnailMariaGraciaCruzHasta hace unos meses se criticaba mucho la falta de unión del venezolano en las acciones que se venían desarrollando, debo reconocer que haciéndole seguimiento a lo que ha sucedido, el año pasado para esta fecha, evaluamos el contexto y vimos que se estaba presentando una “alexitima” emocional, que es una especie de “anestecia” emocional,  es decir, no nos importaba lo que le estaba sucediendo a nuestros coterráneos, la lucha  por la superviviencia nos había aislado en nuestras propias necesidades, es así como vimos situaciones en las que caía una persona desmayada en una de las colas para comprar alimentos y simplemente la gente se quitaba y continuaba su cola, eso como estudiosos de la conducta humana nos preocupó mucho, porque el capital social estaba desapareciendo.

Sin embargo el panorama emocional hoy es diferente, nos hemos unido desde el dolor, ese dolor psicológico que se manifiesta con tristeza,  decepción, ira y frustración.   Ese dolor emocional que es más fuerte que el dolor físico se produce por las siguientes razones:

  1. Por la tristeza que se genera cada vez que cae uno de nuestros jóvenes muerto, cuando vemos que sus sueños de libertad se han truncado, y sobre todo cuando se ve que luchó a su manera por un futuro para todos y lamentablemente fue escogido por el destino entregando su vida. Por esa tristeza de ponernos en los zapatos de esas madres que han enterrado a sus hijos, que es uno de los mayores dolores del mundo.
  2. Por la decepción causada ante la imposibilidad de obtener los recursos básicos para vivir,  en un país que tiene los recursos naturales y un clima fabuloso y los mismos no han sido aprovechados.
  3. Por la ira causada por observar tantas injusticias y ver que los mecanismos y las vías para tener una solución han sido cerrados. Entre ellos la disolución de la Asamblea Nacional por el TSJ y peor aún, cuando personeros del gobierno con actitudes burlonas se comportan de manera desproporcionada a lo que está sucediendo.
  4. Por la frustración que se genera cuando se ven cerradas las posibilidades de tener un mejor futuro con venezolanos capaces que estamos dispuestos a levantar al país desde todo punto de vista.

Pero lo mejor de todo es que esa unión desde el dolor, nos ha cambiado como sociedad y lo digo porque ahora se observan los siguientes elementos:





  1. Cuando ha habido algún caído no solo lo llora la madre y sus familiares, lo lloramos todos los venezolanos, sean del bando que sean. Nos duelen todos los venezolanos que han fallecido y lo estamos demostrando con solidaridad, afecto y muestras de apoyo.
  2. No estamos cansados, van 40 días de lucha y todos desde diferentes escenarios seguimos adelante, con altibajos, pero con la frente en alto con el deseo de cambiar el país.
  3. Nuestros líderes se han unido con una sociedad necesitada, han demostrado conjuntamente con nuestros jóvenes y mujeres una valentía nunca antes vista.
  4. Instituciones como la iglesia se han plegado con un apoyo incondicional al pueblo, han demostrado que somos una sola sociedad, están claros que debemos recuperar el país y sobre todo, apoyar a los más necesitados.
  5. Porque nos preocupa nuestro hermano, ese que no tiene alimentos o medicinas para satisfacer sus necesidades y la de sus hijos y vemos acciones de colaboración para que puedan comer o mejorar la salud.
  6. Porque los que están de un bando sin armas le ofrecen al contrario un rosario, una oración o frases como “el futuro es para todos”.
  7. Porque en cualquier manifestación no vemos quien es rico o pobre, quien es blanco o negro, ni quien es del este o del oeste, todos tenemos un mismo objetivo: “cambiar a Venezuela”.
  8. Porque un valor que nos ha caracterizado a todos los venezolanos siempre ha sido la “hermandad”, y como hermanos nos respetamos y nos queremos. Y desde el dolor de hermanos nos apoyamos para salir adelante.
  9. Porque crecimos desde el punto de vista ideológico y ya sabemos que no se trata de ser de izquierda o derecha se trata de tener un compromiso de generar prosperidad para todos.
  10. Pero lo más importante es que desde el dolor nos estamos convirtiendo en una sociedad madura, no hay madurez sin pasar por cambios fuertes, la madurez proviene del aprendizaje de las experiencias, y de esas experiencias dolorosas el aprendizaje es mayor porque el evento siempre se

Por todo lo antes expuesto, no me queda la menor duda, que desde el dolor saldremos adelante con un país mejor para todos, donde elementos psicológicos como la memoria, el compromiso, la solidaridad y el deseo de prosperidad, saldrán fortalecidos.