El “pintoresco” diputado de la Asamblea Nacional, Pedro Carreño, acusó hoy a la Fiscal General de la República de -entre otros adjetivos en su mayoría peyorativos- insania; pero lo curioso es que su idoneidad para el cargo empezó a cuestionarse justo cuando Ortega empezó a oponerse públicamente a la dictadura de Nicolás Maduro, que según explicó el legislador, el no estar de acuerdo con el madurismo corresponde a “una postura que atenta contra la paz, la vida y la estabilidad” del país.
Por: LaPatilla.com
Lo más irrisorio de las acusaciones del parlamentario “Louis Vuitton”, es que parece pensar que hemos olvidado todos los episodios de “lucidez” que ha protagonizado en su extensa carrera política. Uno de ellos, por ejemplo, ocurrió a principios del año 2002, cuando acusó al servicio de televisión por suscripción DirecTV de espiar a los venezolanos a través del decodificador.
“Resulta ser que aquí nos instalaron en toda Venezuela un sistema bidireccional de televisión por cable que se llama DirecTV donde tenemos todos un video metido en nuestra casa y nos toman video y nos graban”, acusaba Carreño desde el Hemiciclo con solemnidad.
Recordamos además que quien hoy juzga la sanidad mental de Luisa Ortega, también es conocido por utilizar un lenguaje soez en sus entrevistas transmitidas en horario supervisado, ocasionándole reproches de Conatel a los canales que se molestan en difundir su verborrea.
Sin lugar a dudas, el cinismo de los corifeos de Maduro parece ser infinito.
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