Víctor Jiménez Ures: Venezuela heroica, versión 2017

Víctor Jiménez Ures: Venezuela heroica, versión 2017

Víctor Jiménez Ures

 

Cierto es que cuando Venezuela necesita libertadores no los exporta, los pare, y de a millones por cierto, en eso no se equivocó Don Rómulo Betancourt. A la fecha, nunca se vio una represión tan brutal como la sufrida por el pueblo Venezolano a manos de soldados que más parecen un ejército de ocupación que parte del mismo país; pero tampoco se ha visto en toda Latinoamérica un pueblo más arrecho que éste, alebrestado y valiente, enfrentándose a pecho desnudo contra un ejército de cobardes que aún con armas y equipos protectores, corren despavoridos apenas perciben atisbos de vulnerabilidad.

Los niveles de ensañamiento son anti-naturales, ni en la época de Pérez Jiménez se vieron tales atrocidades; y sin embargo la gente sigue en la calle, colaborando cada uno desde los espacios que les corresponden en esta titánica revolución patriótica e independentista que cada día toma más y más aires de gesta heroica. Caen muertos y heridos, las muestras de bestialidad están a la orden del día, ni los tiernos perritos se escapan a la sed asesina, pero ante tanta oscuridad, las banderas y voces de la libertad siguen levantándose cada vez más briosas.

Los cálculos de la dictadura fallaron, pensaron que saldríamos corriendo ante las heridas y muertes, pero no, donde cae un manifestante, los demás decimos “Aquí ha caído un héroe, y su muerte no debe ser en vano” y la lucha continúa. No obstante, algo que debe tener muy claro la dictadura: la justicia llegará y cuando lo haga, será inclemente con la maldad que hoy abusa del poder indiscriminadamente.

EL CHAVISMO SERÁ PROHIBIDO

Tal como fue prohibido el nazismo en Alemania, el fascismo en Italia e incluso el Perejezmenismo aquí mismo, en nuestra Venezuela. Ese es sin duda el fatuo destino que los personeros de la dictadura están labrando para el legado de Chávez. En efecto, cada metrazo en los ojos de quienes quieren ver un país próspero, o bombazo que apaga los corazones que laten por una Mejor Venezuela, es una pala de tierra sobre el capital político que los chavistas heredaron de su líder. De seguir así, en la nueva Venezuela se le imputará un crimen de odio a quienes usen públicamente una franela con los ojos de Chávez o el logo del PSUV.

Corresponde a los Chavistas que no están solicitados por la DEA, ni involucrados en actos de corrupción, y tampoco se quieren ir del país, tratar de salvar lo que resta de aquel casi mítico MBR-200. Aún no es tarde, el cambio viene, pueden retrasarlo pero no impedirlo, y Ustedes lo saben.

¡Que Dios Bendiga a Venezuela!

Víctor Jiménez Ures

Exit mobile version