Luis Oliveros: La destrucción salarial de Nicolás Maduro

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Según cálculos de la Asamblea Nacional, la inflación del mes de junio de 2017 en Venezuela fue de 21,4% (la más alta del año), lo que lleva a que la inflación acumulada en el año alcance el 176,9% (colocando la inflación promedio mensual en 18,5%). Sin lugar a dudas esa cifra representa una muy mala noticia para los venezolanos, que evidencia no solo que el problema inflacionario en el país está muy lejos de acabarse, sino que todo indica que tiende a empeorarse.

En la tabla #1 presentamos la inflación de los primeros semestres de cada año desde 2012, fácilmente se puede observar como la cifra de inflación ha empeorado en cada año (recordemos que las cifras de 2016 y 2017 son extraoficiales, debido a que el BCV dejó de publicar cifras de inflación desde diciembre de 2015).





 

InflacionTabla1

 

Si proyectamos un 18,5% promedio desde julio a diciembre de 2017, la inflación acumulada en el período presidencial de Maduro llegaría a casi 34.000%.

¿Qué está pasando con el Salario?

Según nuestros cálculos, desde su llegada a la presidencia, Nicolás Maduro ha aumentado el salario en 18 oportunidades. En la tabla #2 tenemos los aumentos acumulados por cada rubro del salario, desde mayo de 2013 (fecha de su primer incremento salarial).

 

Tabla2

 

A pesar de esos números tan elevados, la realidad es que el salario mínimo y el salario integral se han movido muy por debajo de la inflación en los últimos años. En el gráfico #1 presentamos la evolución del salario mínimo, del bono de alimentación y del salario integral desde marzo de 2013. Fácilmente se puede observar cómo mientras el bono de alimentación ha mostrado un comportamiento superior a la inflación, los salarios (mínimo e integral) han estado muy por debajo de esta. El salario mínimo ha caído 67,7% en términos reales, mientras que el salario integral lo ha hecho un 44%.

Gráfico #1

 

Vzla salario términos reales

 

En la tabla #3 tenemos por un lado la actual escala salarial en Venezuela, pero por el otro la misma escala si se hubiera ajustado exactamente a la inflación. El cuadro nos indica que el salario mínimo en Venezuela, de haberse ajustado exactamente a la inflación, debería estar en Bs. 301.710, mientras que el salario integral en Bs. 447.590.

 

Tabla3

 

Nota adicional: El deterioro salarial que padecen los venezolanos no solo se evidencia en la caída del poder adquisitivo, sino también en los componentes de ese salario. En marzo de 2013 el 67,4% del total del salario integral correspondía a salario mínimo y el restante 32,6% era el bono de alimentación. Hoy las escalas han cambiado de manera importante, el salario mínimo solo representa el 38,9% mientras que el bono alimentario el 61,1%. Este cambio tiene fuertes implicaciones en las prestaciones sociales de los trabajadores, primas por vacaciones, etc.

Ideas Finales

El actual gobierno no tiene política antiinflacionaria. Tampoco parece importarle. El generar inflación y con ella aumentar los niveles de pobreza de la población venezolana pareciera una política de estado de la actual administración. Con esto buscaría incrementar la dependencia de la población a los “programas sociales” estatales y tener más control sobre ellos.

Hoy en el mundo la inflación no es ningún problema. La inflación promedio del mundo apenas llega a 5% y en la región no pasa de 7%. Existe abundante literatura y precedentes para atacar el problema inflacionario. El gobierno de Maduro escogió aumentos de sueldos para compensar la elevada inflación, cuando lo óptimo era lo contrario (bajar la inflación y mejorar la capacidad adquisitiva real de los salarios).

El problema persistirá.