Van 113 días de una jornada democrática corajuda y arrojada de soberanía popular asumida por el pueblo venezolano de vocación democrática y republicana. Ya van 19 años de una revolución falsa, que hundió las banderas de la izquierda y de paso, por su visibilidad lograda a punta de propaganda pagada por la corrupción y la mentira, se llevó por los cachos y desacreditó a la izquierda mundial. El socialismo del siglo XXI es un golpe noble a la izquierda decente.
Por Julio César Arreaza B
El pueblo venezolano que comenzó a vivir su vocación republicana y democrática, según consta en su partida de nacimiento libertaria del 19 de abril y 5 de julio, se manifestó con todo el esplendor del ejercicio directo de la soberanía popular, el 16 de julio de 2017, día de la Virgen del Carmen, y decidió, mandó, ponerle punto final a la tiranía bellaca de Platanote y el enano siniestro. Quiero decirle a mi profesor Manuel Caballero que mira la historia patria desde el cielo, que siguiendo sus sabias enseñanzas podemos afirmar desde ya que el 16 de julio quedará como una fecha imperecedera en los anales de la historia.
Se empoderó la sociedad civil y dio muestras de excepcional capacidad organizativa para montar ejemplarmente unos comicios pulquérrimos donde se manifestaron más de 7 millones y medio de compatriotas sobre la misma tierra y allende los mares. Tenemos derecho a sentir orgullo y regocijarnos de este esfuerzo sin igual que reconoce el mundo con sincera admiración. Dejamos testimonio perenne de nuestra inquebrantable identidad democrática.
Rendimos tributo y rezamos a Dios por el alma de la venezolana Xiomara Scott, enfermera asesinada en Catia por integrantes de Colectivos amparados por el régimen. Repudiamos la acción letal mientras ejercía el derecho al voto, proscrito por los forajidos en el poder. Se engrosan expedientes que reflejan los crímenes cometidos desde lo más alto del poder y replicado por los mandos de la FA, cuando ordenan practicar la violencia contra ciudadanos que manifiestan por la liberad. Esperamos que todos los representantes de la Unidad se hagan presentes ante la familia de la heroína Scott y muestren gesto de solidaridad.
El 16 de julio el pueblo se contó, eso no se borra y quedó fiel registro; el pueblo que manda por encima de los poderes públicos pone fin a la tiranía y se pronunció por la restitución del hilo constitucional, y dejó en claro que el fraude constituyente a la soberanía popular no va, porque su único objetivo es enterrar la democracia y disolver la república. Esta mácula no se la podrá quitar la revolución que resultó “Mentira”, más bien le cabe “Robolución”.
Venezuela a la vuelta de la esquina reconstruirá con la unión y entrega abnegada de sus hijos al trabajo constructivo y honesto, la mejor democracia del Planeta.
¡No más prisioneros políticos, torturados ni exiliados!