Ante los diversos eventos que se están suscitando en el país, la Ex presidenta de la Corte Suprema de Justicia Cecilia Sosa Gómez se refirió a la cúpula que dirige a los componentes castrenses de la nación, señalando que “el alto mando militar está completamente fuera” de la carta magna.
Aun cuando considera que dentro de las Fuerzas Armadas hay raíces sanas, considera que estas deben encontrar mecanismos para poner en evidencia, lo que el alto mando no representa.
“En definitiva, parece que la Fuerza Armada es la que gobierna, no sabemos si gobierna o es una fuerza pretoriana de Maduro, no lo tenemos absolutamente claro. El Alto mando ha traicionado de acuerdo a unas de las funciones que el artículo 328 le asigna, que es precisamente garantizar la soberanía, y la soberanía no es un tema territorial, sino el conjunto de personas que estamos dentro de territorio”, indicó.
Sosa precisó que aunque el alto mando tiene la apariencia de una gran verticalidad y obediencia, los integrantes de las FF.AA están pasando el mismo trabajo que cualquier otro venezolano, salvo que estén beneficiados por contratos u otros ingresos económicos. Agregó que cualquier ciudadano puede invocar el artículo 333, incluyendo un militar activo.
“El tema de la desobediencia en relación a la falta de cumplimiento de la constitución por parte del alto mando, está generando dentro de la estructura de la Fuerza Armada activos y no activos, una reacción invocando el art. 333 dentro de la función que se ha apartado esa estructura del cumplimiento de la CRBV”.
En referencia a lo ocurrido en el Fuerte Paramacay, dijo que se pone en entredicho la unicidad de la FAN. Señala que en un futuro “hay que replantearse el rol de la Fuerza Armada en Venezuela (…) y si la necesitamos o no en los términos constitucionalmente consagrados, o si necesitamos más una fuerza armada sofisticada en estrategia que en armamento”, explicó.
En otro punto, la doctora en leyes se refirió a la “remoción” de la Fiscal General de la República Luisa Ortega Díaz, manifestando que hay una falta del estado de derecho en Venezuela y que estamos en presencia de un régimen que abandonó los parámetros de la constitución de 1.999.
Argumentó que, con la Fiscal no hubo un antejuicio de mérito, puesto que no se cumplieron los extremos teóricos establecido en la Constitución.
“La Asamblea Nacional Constituyente tiene un problema de origen, de legitimidad, puesto que la convoca Maduro, no la convocó el pueblo, y en consecuencia, no tiene legitimidad ni siquiera para hacer una Constitución, que en definitiva es el objeto. Tenemos una Pseudo Asamblea Nacional Constituyente con la elección de estos 500 y tantos constituyentistas, que ahora ni hay donde ponerlos, pero ellos no pueden legislar, ellos no pueden cesar funcionarios de sus cargos, ellos no pueden nombrar funcionarios, por una razón, y es que la Constitución de 1.999 sigue vigente mientras se elabora el texto eventual, que debe ser sometido a la consideración del pueblo si lo aprueba o no”.
La ex magistrada, resaltó que todos esos actos son nulos de nulidad absoluta, porque usurpan la soberanía del pueblo. “No hay orden Constitucional en Venezuela, no tenemos claro quién gobierna y quién protege (Maduro-Padrino).
La jurisconsulta también se refirió a las decisiones del máximo tribunal del país en contra de algunos Alcaldes de la nación, considerando que no son jurídicas, sino políticas para inhabilitar personas que pudiesen aspirar a lo que ahora es la “apertura”, de unas elecciones regionales.
“Yo creo que hay que verlo de esa forma, si no seríamos absolutamente ciegos, estamos inhabilitando a alcaldes para que no puedan ser aspirantes a gobernadores que es la apariencia de democracia que quiere mostrarnos el régimen, esa es la verdad.“
Daniel Guillermo Colina / @danielgcolina