Inseguridad obliga a comerciantes de Maiquetía a cerrar bien temprano

Foto: Inseguridad obliga a comerciantes de Maiquetía a cerrar bien temprano / elvarguense.com
Foto: Inseguridad obliga a comerciantes de Maiquetía a cerrar bien temprano / elvarguense.com

 
A eso de las 4 y 30 de la tarde, comienzan a bajar las santamarías los negocios en Maiquetía debido al oleaje de inseguridad que los azota diariamente, pues ni la Policía de Vargas ni la Guardia Nacional, despliegan algún tipo de acciones para proteger tanto a comerciantes como a empleados, de los delincuentes que merodean la zona desde hace varios meses, reseña El Varguense.

Empleados de diferentes zapaterías que son de las primeras en cerrar, dicen: “nos tienen a monte porque la zona es demasiado oscura y sola, se aprovechan de la ausencia policial y nos atracan”. Otros atañen la ausencia policial como presunta vinculación con los azotes “pues les conviene cobrar rescate si secuestran algún dueño de tienda”, comentan.

De hecho, en lo que va de este 2017 unos tres comercios chinos han cerrado y aunque no se ha podido definir si a ciencia cierta tuvo que ver con problemas de inseguridad, muchos de los lugareños que acostumbraban comprar en dichos establecimientos afirman que “como eran full trabajadores y se quedaban hasta tarde, los malandritos no los pelaban y los robaban”, señala Carmen Guzmán, vecina de El Rincón.





Por su parte, Yenny Chan, socia de un comercio de la zona, señala que “hasta el momento no hemos tenido problema porque tenemos amigos en la guardia” pero los antiguos dueños si tuvieron problema al principio por algunos antisociales que pretendían extorsionarlos a cada rato y por eso vendieron y se fueron de Vargas. Como opción de seguridad, cierran a las 5 de la tarde y no abren los domingos, “pues está más sola la zona”, dice Chan.

Comercios como Patty, Patricia, Saud, Corte Inglés y la zapatería Total, son de los negocios que más tarde cierran por ser los de mayor concurrencia “quizás por historia y porque nos conocen, pero no estamos exentos de robos y hurtos… nos encomendamos a Dios y así la llevamos”, refiere Mary Duarte, empleada de una de las tiendas. Sin embargo, cuando la delincuencia se pone intensa optan por cerrar mucho más temprano incurriendo esto en pérdidas para la empresa “pero es preferible perder así que perderlo todo… o peor aún perder la vida”, refiere Duarte.

Estos comerciantes de Maiquetía señalan que en múltiples ocasiones han pedido el apoyo a los organismos policiales y de resguardo, pero que las acciones suelen ser momentáneas. “La policía viene de vez en cuando, da sus vueltas, pero es más lo que matraquean que lo que cuidan”, señala un comerciante árabe. Por lo que hacen un llamado a los organismos pertinentes para que se organicen y tomen en cuenta el llamado de la ciudadanía para que los protejan, “ya no se trata de que nos roben una cuanta plata sino que están dispuestos a matar aún sin llevarse un fajo de billetes…”, señala el empresario