Enfermos de paludismo en Ciudad Guayana vuelven a protestar por escasez de medicamentos

Enfermos de paludismo en Ciudad Guayana vuelven a protestar por escasez de medicamentos

En Pozo Verde repitieron esta semana las mismas protestas de junio. El Estado sigue sin resolver la epidemia de paludismo que ha matado, al menos, a ocho personasFOTO WILLIAM URDANETA
En Pozo Verde repitieron esta semana las mismas protestas de junio. El Estado sigue sin resolver la epidemia de paludismo que ha matado, al menos, a ocho personasFOTO WILLIAM URDANETA

 

Desde la semana pasada se intensificaron las protestas de enfermos de paludismo en Ciudad Guayana, por la falta de medicinas anti maláricas, publica Correo del Caroní.

@OrianaFaoro





“El tratamiento viene llegando de Caracas. Lo trae la viceministra de Salud”, es la respuesta que reciben en varios ambulatorios del municipio Caroní, pero la funcionaria no termina de llegar. Los medicamentos tampoco.

El descontento reavivó las protestas en Pozo Verde, donde la semana pasada murieron tres personas a causa de la malaria, por falta de medicinas.

El martes 31 de octubre trancaron la entrada del poblado, en la vía a El Pao. El director del Instituto de Salud Pública (ISP), Franklin Franchi, prometió que hoy llegaría la viceministra con los fármacos. Ante el incumplimiento, la población de Pozo Verde volvió a trancar la entrada.

“Nosotros lo que queremos es medicinas, que el ministerio manden las medicinas y se tomen las fotos después, si quieren… ¿Qué es eso de tener que esperar a una viceministra para el tratamiento? ¿Nuestras vidas no valen, o qué?”, expresó una vecina del sector El Cerrito, de Pozo Verde.

La mujer no reveló su identidad para la publicación de este reporte, “porque no quiero que me vean como saboteadora” dentro del Partido Socialista Unido de Venezuela (Psuv). Sin embargo, cuestiona a las autoridades regionales: “Esta ha sido una parroquia netamente revolucionaria y nos hacen esperar por una viceministra, cuando aquí el paludismo está matando a la gente todos los días”.

Correo del Caroní ha podido confirmar ocho muertes por paludismo en lo que va de 2017, solo en la parroquia Pozo Verde de Ciudad Guayana. De acuerdo con la vecina consultada, esta cifra asciende a más de 20. “Lo del paludismo se pasó de control”.

Durante esta semana, del 30 de octubre al 2 de noviembre, el equipo reporteril ha intentado entrevistar al jefe del Distrito Sanitario Nº 2 Caroní, Erasmo García, pero el funcionario aplazó constantemente el día de la entrevista. Solo confirmó que, efectivamente, no han llegado cargamentos nuevos de tratamiento contra la malaria al estado Bolívar, el más afectado por la epidemia nacional.


Reventa

Las denuncias de venta ilegal del escaso tratamiento abundan. Hay revendedores que ofrecen traer las medicinas completas desde Tumeremo en 500 mil bolívares, mientras el Estado repite que las medicinas, esas que por Ley solo puede entregar el Ministerio de Salud, “están llegando”.

“¿Cómo llegan esas medicinas a las minas? ¿Cuál es la contraloría? ¿Quién va a dar la cara por todo lo que está pasando, por las muertes?”, reprochó la vecina de Pozo Verde. “A nosotros nos dicen que no hay ni una aguja, ni una lámina para hacer el examen de paludismo, pero afuera del ambulatorio hay gente con eso metido en un morral y lo vende por 4mil bolívares. ¿Quién explica eso?”.

 

Por la escasez del tratamiento, han recortado la dosis para que el paciente beba la toma diaria dentro del ambulatorio/Foto Oriana Faoro
Por la escasez del tratamiento, han recortado la dosis para que el paciente beba la toma diaria dentro del ambulatorio/Foto Oriana Faoro

 

Colapso sanitario

La hija de la declarante, de 15 años, tiene paludismo. El examen de laboratorio confirmó sus síntomas hace ocho días. Nunca ha recibido tratamiento ni el ambulatorio de Manoa, Pozo Verde ni en el hospital Dr. Raúl Leoni, de San Félix.

“Eso le ha traído consecuencias a mi hija, casi no puede respirar, y en el ambulatorio de Pozo Verde no hay ni nebulizadores ni nada para atenderla. Fui al de Manoa y me dijeron que si mi hija no tiene daño cerebral no me la pueden recibir. O sea, yo tengo que esperar que mi hija se ponga peor para que me la ayuden”, cuestionó la mujer.

El paludismo se ha extendido exponencialmente en todo el estado Bolívar en los últimos dos años. En 2015, la epidemia estaba concentrada solamente en el municipio Sifontes.

Para julio, 65 personas habían fallecido en toda la región, de acuerdo con datos aportados por la Red Defendamos la Epidemiología, que calculaba casi 200mil contagios maláricos en toda la entidad. El Distrito Sanitario y el Ministerio de Salud siguen en silencio y sin publicar cifras oficiales. El último dato es el del Boletín Epidemiológico de 2016, en donde se confirmaba un repunte nacional de contagios de más del 70 por ciento versus 2015.

Por ahora, los vecinos de Pozo Verde recurren a infusiones con plantas medicinales para calmar los síntomas del paludismo, pero no logran curarse por completo.

La situación se agrava con la falta de ciertas medicinas: Cuando llega tratamiento contra la malaria, no hay disponibilidad de primaquina, el fármaco encargado de evitar que la enfermedad repita en el paciente.

“Nosotros estamos dispuestos a llevar este reclamo a Caracas, al propio presidente Maduro, porque nuestras vidas valen. El compromiso político no es con una foto sino con nuestra gente.