Ahora que Venezuela y PDVSA, su compañía petrolera estatal, fueron oficialmente declaradas el viernes pasado en mora sobre su deuda por la Asociación Internacional de Swaps y Derivados (ISDA por su siglas en inglés), los analistas se encuentran observando de cerca lo que podría ser el próximo movimiento del insolvente gobierno de Maduro, ahora que lo está, al menos en papel, aislado de la mayoría de los mercados de capitales internacionales (con lagunas ocasionales cuando se trata de fondos chinos y rusos).
Por: ZeroEdge / Oilprice
Traducción libre de LaPatilla.com
No se tuvo que esperar mucho, y según informa Reuters, PDVSA, con problemas de liquidez y en bancarrota, ha recurrido al desvío de petróleo de sus empresas conjuntas de pago en efectivo con firmas extranjeras para alimentar sus refinerías nacionales.
En un ejemplo, PDVSA solicitó a su empresa conjunta de Petropiar con Chevron que entregara hasta el 45 por ciento del petróleo que planeaba exportar en noviembre sin ningún pago. Si bien la empresa estatal no respondió a una solicitud de comentarios de Reuters, Chevron, que podría perder mucho más, declinó también hacer comentarios al respecto. La reducción de las exportaciones de crudo de Petropiar está teniendo un impacto principalmente en los clientes en los Estados Unidos, de acuerdo con una de las fuentes y los datos de flujos comerciales de Thomson Reuters.
“PDVSA comenzó a solicitar algunas cargas de Petrocedeño para el Centro de Refinación Paraguana (CRP). Ahora le está pidiendo a Petropiar que renuncie a casi la mitad de su producción de crudo”, dijo la fuente de Reuters.
De agosto a octubre, PDVSA tomó al menos 1 millón de barriles por mes de crudo pesado de Petropiar luego de adquirir el crudo Zuata Sweet de Petrocedeño a principios de este año. Está buscando 2 millones de barriles, o el 45 por ciento de la producción total de Petropiar para noviembre.
La “autocanibalización” de la principal empresa del país
La acción de Venezuela es una extraña forma de autocanibalización, ya que las empresas conjuntas de PDVSA exportan crudo mejorado a compradores de todo el mundo y, como tal, la desviación de Maduro se convierte en la principal fuente de ingresos del gobierno. La razón por la cual el gobierno ha recurrido a una decisión tan drástica, que cortará significativamente la única fuente de financiamiento en dólares de Venezuela, es lidiar con la escasez de combustible intermitente y cada vez más aguda que afecta a la nación debido al mal estado de sus refinerías, que en algunos casos funcionan a un tercio de la capacidad.
Reuters confirma lo siguiente: “la falta de estas exportaciones se suma a la crisis financiera del país cuando el presidente Nicolás Maduro intenta reestructurar unos 60.000 millones de dólares en deuda con los tenedores de bonos”, incluso cuando algunas de las exportaciones petroleras venezolanas ya están bajo acuerdos de petróleo por préstamo con Rusia y China.
Además de la empresa conjunta de Petropiar con Chevron, PDVSA ha tomado este año petróleo para sus refinerías nacionales de su proyecto Petrocedeño con Total y Statoil. Las desviaciones están agregando nuevas tensiones al flujo de caja de las empresas. Los socios extranjeros en varias empresas conjuntas también han estado obligados desde el año pasado a pagar por la nafta importada utilizada para diluir el petróleo de la Faja del Orinoco cuando los mejoradores no están operando o trabajando a capacidad reducida, lo que perjudica aún más sus ganancias.
Peor aún, la apropiación de efectivo impacta no solo a PDVSA, sino a los socios internacionales: “Se espera que las empresas conjuntas sean compensadas por el petróleo desviado mediante dividendos pagados a los socios. Sin embargo, algunas firmas petroleras extranjeras que operan en Venezuela no han podido repatriar los pagos a sus empresas matrices “.
Mientras tanto, la industria petrolera nacional de Venezuela se está desplomando debido a que las finanzas de PDVSA son tan débiles que está luchando por encontrar los fondos para perforar pozos, mantener yacimientos petrolíferos y mantener los gasoductos y puertos en funcionamiento, señala Reuters. Por contexto, según los últimos números de la OPEP, la producción total de crudo de Venezuela disminuyó en octubre a su nivel más bajo desde 1989.
Las sanciones impuestas por Estados Unidos a funcionarios del gobierno bolivariano de Venezuela y su empresa estatal PDVSA no han ayudado, y también han contribuido a exportaciones más débiles este año, ya que la mayoría de las contrapartes de la energía costa afuera demandan cartas de crédito, que sin embargo ningún banco avalará debido al temor en la escalada de sanciones.
Como una última medida, el gobierno de Maduro ha recurrido cada vez más a Rusia para obtener el efectivo y el crédito que necesita para sobrevivir, ya que China no ha extendido más crédito a Venezuela en medio de retrasos en los envíos de petróleo, informó Reuters en agosto.
Mientras tanto, la unidad de refinación estadounidense de PDVSA, Citgo Petroleum, comenzó a aumentar sus importaciones de crudo mejorado venezolano de las empresas conjuntas como una forma de compensar las compras decrecientes de su empresa matriz, que está luchando por cubrir acuerdos de petróleo por préstamo con empresas rusas y chinas en medio de la caída de la producción.
Citgo ha tenido dificultades para comprar suministros de crudo directamente a productores no venezolanos debido a las sanciones impuestas por Estados Unidos este año, según fuentes comerciales. Los bancos estadounidenses han estado evitando extender incluso el crédito a corto plazo a PDVSA y sus subsidiarias, que han afectado las compras de petróleo de Citgo. Citgo ha dicho que no enfrenta problemas de crédito.
Pero el esfuerzo de Citgo para compensar los problemas de exportación de PDVSA podría no durar, dijo una de las fuentes, ya que el creciente suministro del crudo de las empresas conjuntas a las refinerías venezolanas está minando su capacidad para comprar petróleo mejorado.
Y el martes, Venezuela dio a conocer su última “solución” a los problemas de Citgo: como informó Bloomberg esta mañana, el fiscal venezolano, Tarek William Saab, dijo que las autoridades arrestaron al presidente interino de Citgo, José Pereira. Además, también fueron detenidos Tomeu Vadell, Alirio Zambrano, Jorge Toledo, Gustavo Cárdenas y José Luis Zambrano de Citgo. Esta última “solución” radical solo acelerará el fiasco de la gasolina venezolana, que proviene de la nación con las mayores reservas de petróleo del mundo, y es la indulgencia final, y la más irónica, del estado socialista.
Por Zerohedge