El niño chino que llegó congelado a su escuela recibirá ayuda

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El debate sobre la pobreza en China volvió a llamar la atención después de que se viralizaran unas fotos en las redes sociales de un niño de 8 años que llegó a su escuela con las manos inflamadas, mejillas rojas y con hielo el pelo y las cejas.





Según la agencia de noticias estatal de China, Wang Fuman, ahora conocido como “el Niño Congelado” o “el Pequeño Wang”, camina más de una hora para llegar a su colegio a 4,5 kilómetros de distancia de su casa, en Zhaotong, una zona rural de la provincia de Yunnan. Las temperaturas en la región esta semana bajaron hasta -9 grados Celsius, publica france24.com.

Una imagen que corre por las redes sociales muestra los compañeros de clase riéndose del menor vestido con una chaqueta delgada y sin sombrero cuando llegó al salón de clases con escarcha en el pelo. Otra foto muestra las pequeñas manos inflamadas y sucias de Wang con su tarea escolar.

El maestro de Wang tomó las fotos el 8 de enero de 2017 para enviarlas al director de la escuela y a algunas otras personas. Las imágenes se compartieron hasta que llegaron a los medios locales que luego informaron sobre la historia.

‘People’s Daily, China’ publicó una foto de Wang con la leyenda “una foto conmovedora de un niño abandonado cubierto de escarcha y nieve”, en referencia a las decenas de millones de niños que quedan en las aldeas y rara vez ven a sus padres después de que se mudaran a las ciudades para trabajar.

Según fuentes de noticias locales, Wang vive con sus abuelos en una casa hecha de barro y ladrillos y solo ve a su padre, un trabajador migratorio, cada cuatro o cinco meses. Su madre se fue cuando era muy pequeño.

 

 

“Escuchar las noticias del ‘Niño Congelado’ rompió los corazones de todos. Hoy el padre que estaba trabajando lejos se apresuró a llegar a casa para manejar y organizar el día de hoy. Aliento al usuario: estudiar duro para cambiar el destino”, opinó en la red social Weibo (equivalente a Twitter), Amin001.

La historia del ‘niño congelado’ generó una ola de críticas sobre el gobierno de China, con comentaristas diciendo que las autoridades no están haciendo lo suficiente para ayudar a las comunidades pobres en la China rural y, más específicamente, pidiendo al gobierno que brinden asistencia a los niños que se quedan en las aldeas.

Shi Rui Gang opinó en Weibo que “no sorprende que el chico apareciera en la escuela después de un largo camino, con su cara roja y hielo en sus cejas y su pelo. Este es un anhelo por la escuela, pero también en el examen de respeto, miedo al frío, levantarse a las cinco en punto, para caminar 4.5 km de sendero de montaña”.

Algunas empresas locales respondieron a las noticias del pequeño Wang con donaciones de fondos para proporcionar ropa más adecuada a los niños de la provincia y mejorar el sistema de calefacción en el colegio.