La crisis venezolana pica y se extiende en las instituciones gubernamentales a manos del Estado venezolano, en esta ocasión la información proviene de las filas de la Policía Nacional Bolivariana que está sufriendo una alta cantidad de deserciones de sus funcionarios activos a nivel nacional, quienes podrán ser juzgados por “traición a la patria” si no justifican el no regreso a las filas del órgano de in-seguridad.
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Los funcionarios policiales, que viven la crisis económica como cualquier otro venezolano, deben enfrentarse al auge de la delincuencia que opera sin ningún tipo de control en la geografía venezolana y los mismos estarían emigrando para buscar mejores condiciones de vida para ellos y los suyos.
Se pudo conocer que los policías, que abarcan distintos rangos desde altos, medios y bajos, estarían faltando a sus obligaciones metiendo reposos, solicitando la baja o simplemente desapareciendo del organismo; situación que prendió las alarmas en el cuerpo policial donde estarían siendo catalogados de “traidores a la revolución”.
La fuente, que prefirió mantenerse en el anonimato, reveló que entre las acciones coercitivas e ilegales que aplicarán a los funcionarios estarían la prohibición de salida del país, bloqueo de pasaporte y alerta en el Sistema Integrado de Información Policial.
La “cacería de brujas” habría iniciado oficialmente luego de una reunión con el ministro de Interior y Justicia, y los altos mandos del cuerpo policial creado hace escasos nueve años.