90% de las escuelas venezolanas hoy no cuentan con el Programa de Alimentación Escolar (PAE), denunció Eric Ondarroa, director general de la Fundación Arturo Uslar Pietri (FAUP). El número, según puntualizó, obedece a un sondeo – realizado por la institución de la que forma parte- en escuelas de la capital y del interior del país.
Nota de Prensa
En entrevista para Reporte Estelar, trasmitido por Globovisión, el también secretario general de la Alianza del Lápiz, subrayó con preocupación que la crisis alimentaria que hoy agobia al país está presente en la escuela venezolana, y es que las mismas proyecciones evidencian que más del 50% de los alumnos de la educación pública oficial no acuden a sus aulas de clases debido a la ausencia del PAE.
Coincidiendo con los balances de Fetramagisterio, institución con la que vienen trabajando de la mano, Ondarroa agregó que ya no son solo los alumnos con hambre en las escuelas, sino que “también los docentes se están desmayando en los salones por todas las condiciones que tiene hoy la educación venezolana”.
“Estamos atravesando una terrible crisis de presente y futuro, la educación venezolana tiene que dolerle a alguien. La sociedad venezolana debe pensar en el futuro, las organizaciones políticas deben reaccionar y el Estado venezolano tiene que actuar con sentido de grandeza en función de las próximas generaciones y no solo en las próximas elecciones”, exigió.
En cuanto al reporte del estado general de la educación, el representante del movimiento de educadores destacó que hoy el sistema escolar venezolano atiende a la misma cantidad de niños que cubría para el año 98, pese a que la población venezolana ha aumentado considerablemente desde entonces.
Sobre este punto, Ondarroa explicó que según la proyección para el año 2016-2017, la educación venezolana está dejando de atender al menos 400.000 niños y jóvenes anualmente. Al respecto rescató que esto ha originado que hasta la fecha cerca de siete millones de infantes se encuentren fuera del sistema escolar.
Entre estos enumeró a quienes nunca han ingresado a un aula de clases, a los que han desertado y a los que, a pesar de estar inscritos, hoy no acuden a clase porque sencillamente –según sumó- la educación no es gratuita, es decir, cuyos padres no tienen para comprar útiles, garantizar alimentación y mucho menos pagar transporte.
Antes de finalizar, Ondarroa enfatizó que la única manera que Venezuela salga adelanta es poniendo como primer punto de la agenda nacional a la educación. Para ello, recalcó que hace falta definir cuál es esa Venezuela que quieren y en función de ello establecer metas para los próximos 5, 10 y 15 años en un Programa Nacional de Desarrollo moderno que haga de los chamos venezolanos jóvenes competitivos con el resto de América Latina y del Mundo.