Cuerpos de equipo de prensa asesinado en Colombia llegarán a Quito el miércoles

El canciller ecuatoriano, José Valencia, habla hoy, lunes 25 de junio del 2018, durante una rueda de prensa en Quito (Ecuador). Los cuerpos de los tres integrantes del equipo de prensa del diario El Comercio, secuestrados en marzo pasado y posteriormente asesinados en Colombia, llegarán a Quito el próximo miércoles en un vuelo de la Fuerza Aérea Ecuatoriana (FAE). EFE/José Jácome

 

 

Los cuerpos de los tres integrantes del equipo de prensa del diario El Comercio, secuestrados en marzo pasado y posteriormente asesinados en Colombia, llegarán a Quito el próximo miércoles en un vuelo de la Fuerza Aérea Ecuatoriana (FAE).





EFE

Así lo informó hoy el canciller ecuatoriano, José Valencia, en una rueda de prensa en la que confirmó que los tres cadáveres encontrados en la localidad colombiana de Tumaco corresponden a Paúl Rivas, Javier Ortega y Efraín Segarra.

“El miércoles en la mañana será el traslado de los cuerpos a Ecuador en un avión de la FAE”, que también traerá a la capital ecuatoriana a los familiares que fueron a la ciudad colombiana de Cali (suroeste) a apoyar el proceso de identificación de los cadáveres, agregó Valencia.

Las autoridades colombianas concluyeron hoy el “protocolo de verificación” de los cuerpos hallados en el sur del país y confirmaron que se trata de los tres miembros del diario quiteño El Comercio.

En un breve comunicado, la Cancillería y el Ministerio de Defensa detallaron que los cadáveres son los del periodista Javier Ortega, el fotógrafo Paúl Rivas y el conductor Efraín Segarra, que fueron secuestrados y asesinados por un grupo disidente de las FARC que lidera Walter Patricio Arizala, alias “Guacho”.

Los tres cuerpos “serán entregados a las autoridades ecuatorianas, que ya dispusieron del transporte aéreo desde Cali (suroeste) para tal efecto”, agregó la información del Gobierno colombiano.

El equipo periodístico fue secuestrado el pasado 26 de marzo en una zona rural de la parroquia ecuatoriana de Mataje, provincia de Esmeraldas, fronteriza con Colombia, a donde se había desplazado para cubrir la inseguridad creciente en la zona.

Poco después el grupo disidente autodenominado “Frente Oliver Sinisterra” asumió la autoría del secuestro y el 14 de abril el presidente ecuatoriano, Lenín Moreno, confirmó el triple asesinato.