Atrapados y sin salida, por Nelson A. Pérez V.

 

La crisis política terminal del madurismo se acelera exponencialmente en la misma medida que se acelera la híper inflación, son las dos caras de una misma moneda.

La caída de la producción petrolera parece imparable, hoy estamos produciendo 1.350.000 b/d de petróleo con una caída intermensual que ronda en promedio 35.000 barriles diarios, es decir una merma en los ingresos petroleros de aproximadamente $ 2.625.000 diarios. La fuga de talentos en la industria es espeluznante. Todos los taladros propiedad de PDVSA paralizados solo funcionan los de las empresas mixtas. Los tanqueros, propiedad de la estatal petrolera, fondeados en altamar fullll de petróleo y sin poder salir por temor al embargo petrolero, se agota la capacidad de almacenamiento.  Con lo que cuesta un catón de huevos (Bs.4.000.000) pudieras comprar, aproximadamente 114 gandolas de combustible de 35.000 litros de carga, así de estructuralmente exagerado es el subsidio a la gasolina.





El Metro de Caracas uno de los más modernos en estructura de Latinoamérica, hoy gratuito, es un espacio, para apretujones, atracos, sofocamiento, etc. El transporte auto motor urbano en crisis, funcionan solo el 30% de sus unidades públicas y privados y el incremento de tarifas es insoportable para el ciudadano de a pie.

La crisis hospitalaria en fase terminal, los pacientes con enfermedades crónicas en terapia intensiva, no hay medicamentos y los pocos que se consiguen a precios astronómicos. La comida para los pacientes es insuficiente y de mala calidad proteica. Las manifestaciones de enfermos, médicos, enfermeras y personal hospitalario se iniciaron para no parar.

La crisis en servicios estratégicos como electricidad, cantv, agua, aseo urbano, está en una etapa de no retorno pues las infraestructuras que sustentan estos servicios están en fase terminal. Con ello la paralización de la producción y productividad de bienes y servicios con énfasis en los servicios de salud. La siderúrgica de Guayana otrora ejemplo de ascenso de las fuerza productivas del acero hoy en ruinas.

La temporada de lluvia hace estragos en toda la vialidad nacional con afectación en las vías  agrícolas lo que impide el traslado de productos perecederos, cuyos precios hoy en día son impagables y la gente compra por gramos. En el sector agro alimentario la crisis afecta la génesis de la estructura productiva, en el caso de los huevos, proteína básica para el pueblo, se destruye la fase primaria la camada de gallinas madres hoy en extinción, lo cual afecta toda la cadena productiva. Vacas lecheras sacrificadas para carne. Semillas para la siembra acaparadas por el régimen para abastecer los fundos zamoranos que son un desastre productivo.

El parque industrial destruido en más de un 60%. Las federaciones y cámaras de industriales señalan que para fin de año habrán desaparecido más de 1.000 empresas grandes y medianas.

La híper inflación conjuntamente con el desplome de toda la infraestructura productiva y de servicios del Estado, con su incidencia en el sector privado se precipita como un trágico deslave en todos los espacios del parque industrial venezolano, la cadena de comercialización y su profunda incidencia en el desabastecimiento alimentario. No existe un rincón a lo largo y ancho del territorio nacional donde el ciudadano no exprese su profundo malestar por la forma de vida en que nos arrastra el régimen.

El madurismo insiste en la instauración del modelo castro comunista con los clap como bandera alimentaria en un país que se desnutre aceleradamente. Cada día huyen más venezolanos de este desastre de país.

El dinero electrónico en sustitución de monedas y billetes pareciera la nueva forma de circulación monetaria. A estas alturas es imposible que se aplique el nuevo cono monetario tan cacareado por el régimen, no existen los billetes ni la adecuada y sofisticada plataforma tecnológica  para su aplicación exitosa.

El régimen como siempre buscando cúlpales de su inoperancia, le echa  la culpa a la fulana guerra económica y ahora inventa, una vez más, la invasión armada desde el extranjero.

La MUD por fin pone al relieve su inoperancia y oportunismo, AD se deslinda, PJ y VP siguen a destelladas por una botella vacía.

Maduro exige la los oficiales de las FANB, que son ascendidos de rango, firmar un compromiso de lealtad  a su proyecto comunista.

Estamos en una profunda caverna cuyas paredes se desploman  y nos aplastará a todos.

Econ. Nelson A. Pérez Valdivieso Miembro del Secretariado Nacional del Movimiento Progresista de Venezuela. MPV.

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