Monseñor Mario Moronta cree que el Gobierno y la Iglesia deben tender puentes ante la crisis

Monseñor Mario Moronta

 

El monseñor Mario Moronta, obispo de la ciudad occidental venezolana de San Cristóbal (oeste), aseguró hoy que tanto a la Iglesia católica como al Gobierno de Venezuela les ha faltado “tender puentes seguros de encuentro” para sobrellevar la crisis que atraviesa el país caribeño.

EFE





En declaraciones al canal privado Globovisión, Moronta reiteró la importancia del diálogo entre los distintos sectores haciendo la salvedad de que dialogar “no es aceptar lo que tu dices o lo que yo digo sino compartir las dificultades (…) y sobre todo la búsqueda de ayudas para la gente”.

“Necesitamos diálogo con representantes y acompañantes (…) pero también una representación popular, no se trata solo de que las cúpulas decidan por la gente” dijo Moronta en medio de los actos de peregrinación del Santo Cristo de La Grita, una importante festividad religiosa de Venezuela.

Igualmente señaló la necesidad de romper paradigmas y de que el Gobierno “tenga mayor apertura con la gente” recordando que, al igual que la Iglesia, la vocación de un Gobierno debe ser de servicio.

Se refirió a la nueva coalición opositora llamada Frente Amplio y señaló que en esta alianza, a la que calificó como “pacto de élites” le “falta mucha gente” pues a su juicio “no está representada la gente de pueblo”.

El último intento de diálogo entre Gobierno y oposición en Venezuela fracasó en febrero pasado, cuando la delegación opositora se negó a firmar un acuerdo por considerar que no incluía varias de las exigencias del antichavismo.

La Iglesia católica y el Gobierno venezolano mantienen relaciones tensas desde la llegada al poder de Hugo Chávez en 1999 que manifestó desde sus inicios sus desacuerdos con la institución religiosa, un punto de vista que comparte su sucesor y actual presidente, Nicolás Maduro.

Los obispos venezolanos, por su parte, también han hecho reiteradas críticas a los Gobiernos chavistas y les han exigido que abra un canal humanitario para que al país ingresen medicamentos y ayuda sanitaria en general.

La Iglesia venezolana ha hecho insistentes llamados a la unidad y ha dicho que “nunca se negará a un diálogo” siempre que tenga las características que definen el proceso de conversaciones.