Analistas afirman que Venezuela debe pagar a bonistas para no arriesgar a filial de Pdvsa

Analistas afirman que Venezuela debe pagar a bonistas para no arriesgar a filial de Pdvsa

El logotipo corporativo de la petrolera estatal PDVSA se ve en una estación de servicio en Caracas, Venezuela, el 24 de febrero de 2018. Fotografía tomada el 24 de febrero de 2018. REUTERS / Marco Bello

 

La ansiedad por que Venezuela no logre pagar sus deudas crece cuando faltan menos de tres meses para que termine el año y, si bien la situación es más crítica, la empresa petrolera estatal PDVSA ha de buscar la forma de honrar el pago para no perder su filial en EEUU, CITGO, dijeron expertos a Sputnik.

POR REDACCIÓN SPUTNIK 





“La situación de PDVSA (Petróleos de Venezuela SA) es esta vez más crítica, si no paga corre el riesgo de que la puedan ejecutar afuera; yo me imagino que PDVSA va a hacer todo lo posible para evitar que eso ocurra, y se habla de Citgo y sus tres refinerías porque serían más que suficientes para pagar todo lo que se debe”, dijo a Sputnik el economista experto en hidrocarburos Rafael Quiroz.

Venezuela tiene que pagar 2.400 millones de dólares de vencimiento de bonos de la deuda pública antes de que concluya 2018, pero solo este mes debe cancelar 1.598 millones de dólares.
A ese monto se suman 721 millones dólares de noviembre y 1.080 millones dólares para diciembre.

De ellos, “lo que más puede preocupar es la amortización del bono PDVSA 2020 (por el año de vencimiento), que es de 842 millones de dólares”, explicó a Sputnik el economista experto en hidrocarburos Carlos Mendoza Potellá.

El bono 2020 tiene una hipoteca del 50,1% del capital social de Citgo Holdings, una de las dos compañías controladoras de Citgo.

Mendoza Potellá, también profesor de la Universidad Central de Venezuela y asesor del Banco Central, explicó que “si se puso en garantía Citgo y no se paga, tendrá que liquidarse o darle participación accionaria al deudor”.

El experto cree poco probable que Venezuela llegue a ese extremo.
En abril Venezuela pagó 107 millones de dólares en intereses del bono 2020, evitando así acciones contra su filial en Estados Unidos.

Pero Quiroz cree que la situación esta vez será más dura.

“Es una situación bastante difícil, porque por una parte tiene que pagar, pero segundo no hay liquidez, entonces está un poco complicada y si no paga corremos riesgos de que se nos incauten algunos activos afuera”, apuntó.

Mendoza Potellá señaló, por su parte, que hay un grupo de acreedores que esperan que el Estado y su principal compañía se declaren en bancarrota.

“La posibilidad de que haya una bancarrota estimula a los zamuros que esperan un quiebre, aguardan que comience a morir para empezar a roerle las entrañas”, acotó.

El precio del crudo comenzó a elevarse vertiginosamente en los últimos meses.

La cesta venezolana alcanzó por primera vez en tres años 75,9 dólares por barril, tras haber llegado a su mínimo de 18 dólares en 2015.
Sin embargo, los analistas concuerdan en que esta recuperación del precio no significa un oxígeno para Venezuela y que por el contrario es una consecuencia directa de la caída de su producción y de la de Irán.

En 2000 Venezuela bombeaba 3,5 millones de barriles por día, y en agosto de este año apenas conseguía extraer 1,2 millones de unidades, según el informe de la Organización de Países Exportadores de Petróleo (OPEP).

La casa de bolsa venezolana Rendivalores estima que el monto de intereses no pagados de la deuda venezolana asciende a 6.400 millones de dólares, e incluye títulos de la República, de PDVSA y de Elecar (actual Corporación Eléctrica Nacional).

Esa suma es cercana al monto de las reservas internacionales del Banco Central, que cerró septiembre en 8.451 millones de dólares.