Luis Somaza: Por mi colega Albán

Venezuela enfrenta un luto diario, un dolor inexplicable y una desesperación incontrolable (…) Hoy los ciudadanos demandan unidad, una unidad sincera, con principios y valores, con una ruta clara e inequívoca, una unidad de ciudadanos y políticos, hoy estamos urgidos, y por eso estamos comprometidos con hallar rutas que nos lleven al quiebre, para así lograr el cambio en nuestro país.

Lo que ha venido pasando en Venezuela, estos 20 años de comunismo, no pueden volver a pasar más nunca en nuestro país. Y quiero aprovechar este espacio, este momento, estas letras, para reconocer y asumir mis errores, no solo como político, sino como ciudadano; sobre todo como ciudadano, porque antes de ser Concejal, soy ciudadano.





Los venezolanos hemos permitido “inconscientemente”, que todas estas cosas pasen… Nos quejamos, twitteamos, nos “expresamos”, pero pasan los días y se nos olvidan las cosas, lo que hoy pasa en Venezuela es consecuencia de nuestros actos como ciudadanos –sí, los políticos también tenemos culpa de ello-.

Cuando a Chavez se le ocurrió la “brillante” idea de expropiar –robar- no hubo mayor reacción de los liderazgos políticos mucho menos de los ciudadanos (salvo los afectados), solo declaraciones, twitter, una que otra “demanda” entonces, se normalizó todo (…) Así como eso, al régimen se le siguieron ocurriendo más “brillantes” ideas, como: Despedir a empleados por causas políticas, perseguir políticos hasta exiliarlo del país, secuestrar políticos y militares, asesinar a jóvenes estudiantes por protestar, violar inmunidad parlamentaria, asesinar a un Concejal…

Para todo lo planificado –nada es casualidad-, ellos hacen una prueba y ven como reaccionamos y de pendiendo de nuestra reacción avanzan a ejecutar su plan, ejemplo:

¿Por qué los venezolanos hacen colas? -siempre se están quejando y son conscientes de que han muerto personas en esas largas colas- Es sencillo, porque las normalizamos, incluso se ha buscado la forma de hacer bien la cola, sin colearse y que se garantice que todos los que conforman la cola puedan obtener el producto por la cual se está haciendo la cola.

Con esto no busco regañar a los venezolanos, mucho menos satanizarlos, pero si quiero que juntos reflexionemos y actuemos.

Sé que mis conciudadanos -muchos, no todos- buscan soluciones en nosotros (los políticos; Presidente, Gobernadores, Alcaldes, Concejales…) pero, si solo por un momento, nosotros como ciudadanos, como venezolanos, defendemos nuestros derechos, sin miedo; les apuesto que la historia sería distinta. El venezolano no debe temer a sus gobernantes, es todo lo contrario los gobernantes deben temer a sus gobernados.

Lo que pasó con el Diputado Juan Requesens fue una prueba, buscan quebrarnos física y espirutalmente, pero, lo que pasó con mi compañero Concejal, Fernando Albán, solo fue un borrador de lo que este régimen pretende hacer…

No, no hay que tener miedo. No, no podemos rendirnos. Hemos llegado muy lejos, aquí estamos, no ha sido fácil, pero tampoco puede ser en vano. La libertad nos tiene que costar, porque la tenemos que valorar y que más nunca nos la pretendan quitar.

Yo no tendría cara para mirar a mi hijo en unos años y decirle que no pude, que tendrá que crecer en otras tierras y rodeado de otras costumbres porque no logramos conquistar la libertad.

Esto que hoy sentimos, esto que hoy hemos venido sintiendo por años, debemos canalizarlo, no para llenarnos de odio y rencor, sino para avanzar y conquistar la libertad, Dios está con nosotros y esta es una causa noble, pero sobre todo justa, Venezuela y su libertad vale la pena.

Avancemos a la libertad por, Bassil Da Costa, Robert Redman, Geraldine Moreno, Juan Pablo Pernalete, Miguel Castillo, Neomar Lander; por mi colega Concejal Albán.

¡Libertad o nada!