“En la sesión de la Asamblea Nacional del pasado 26 de septiembre, en la cual estuvimos en representación de la APUSB, se declaró la emergencia educativa compleja en Venezuela y se aprobó legislar en procura de la defensa de la autonomía universitaria, asunto por demás de suma importancia e interés para las universidades nacionales y para quienes desde sus campus demostramos día a día nuestro compromiso con el país. Para la APUSB esto ha sido una exigencia reiterada. En noviembre de 2017, por ejemplo, le solicitamos a la Asamblea Nacional que abordara el agudo problema que encaran las universidades venezolanas al estar algunas de ellas directamente intervenidas y otras, como la USB, simuladamente intervenida. En verdad, todas están vulneradas en su autonomía por la vía presupuestaria y por el impedimento de realizar elecciones desprendido de una sentencia al respecto emitida por el Tribunal Supremo de Justicia”, indicó hoy el presidente de la Asociación de Profesores de la Universidad Simón Bolívar, profesor William Anseume.
Nota de prensa
Agregó Anseume: “Es nuestro deber agradecerle a la Asamblea Nacional, y en especial a integrantes de la Fracción 16-J como el diputado Luis Barragán, entre otros, el que haya sido posible que el tema de la educación en Venezuela fuese debatido como corresponde para acertar con la declaración de emergencia. Nuestro interés ahora se centra en que se legisle en favor de la autonomía universitaria para que, por ejemplo, se sancione cualquier vulneración a ésta. Insistimos en la necesidad de profundizar en el tema para que se despierte en toda la sociedad la preocupación por la honda afectación que sufren nuestras casas de estudios, ahogadas como están en su desempeño institucional por la deliberada política llevada a cabo en este sentido por el gobierno nacional”.
Sobre el tema se pronunció igualmente el Secretario General de la APUSB, profesor Luis Buttó, al señalar: “El rescate de la autonomía es un compromiso impostergable que estamos obligados a honrar todos los universitarios venezolanos. Es necesario dar pasos muy concretos en esta dirección y uno de ellos es la franca, abierta, desprejuiciada y sincera discusión sobre la elección de autoridades. En líneas generales, ya suman más de 10 años sin que éstas hayan podido renovarse, con todo el deterioro institucional progresivo que esto acarrea. Renovación frustrada que además involucra a otros órganos de cogobierno, como las representaciones profesorales, estudiantiles, de trabajadores o egresados en los distintos Consejos. Mientras esto ocurre, se huella la vida interna de muchas universidades, al designar desde el oficialismo autoridades extrañas a nuestras instituciones, como ocurrió con la imposición del Vicerrector Académico en la USB, quien, a todo efecto legal, suple al Rector, de ser necesario. Esto va en contravención de lo que en verdad necesitan las universidades nacionales y el país en general, no otra cosa sino más y mejor democracia”.
Concluyó Buttó: “Desde la APUSB le solicitamos a la Asamblea Nacional, como órgano legítimo de la soberanía popular que es, cree, de manera perentoria, una Comisión Especial que aborde el delicado tema universitario y sus principales aristas: la diáspora de profesores, estudiantes, empleados y obreros; la anulación en la práctica de la autonomía; la imposibilidad de llevar adelante la investigación y la extensión que se requiere para enfrentar los grandes problemas nacionales; los presupuestos siempre insuficientes, entre otras. El asunto no es ganar tribuna con discursos emocionados. En este caso, la sinceridad, la preocupación, no son suficientes. Acciones concretas, resultados tangibles es lo que requerimos los universitarios. De lo contrario, el principal foco de irradiación de conocimiento y ciencia en el país terminará extinguiéndose irremediablemente, para dar paso a un tipo de educación que ya no podrá llamarse superior, desconectada por completo de las reales necesidades del país trazadas por su incorporación a la sociedad del conocimiento, y simple elemento repetidor de vetustas y fracasadas posturas ideológicas. Sin pensamiento libre no hay futuro promisorio”.