Lituania es un pequeño país europeo con fronteras con el mar Báltico, Letonia, Polonia y Bielorrusia. Anexada a la Unión de Repúblicas Socialistas Soviéticas (URSS) en 1945, logra su independencia en 1991, y desde entonces acometió grandes reformas económicas y políticas consolidándose también como una democracia.
Especial por DMB | lapatilla.com
Lituania tiene una superficie de 65.200 Km2, similar a los 64.986 Km2 del Estado Guárico, con una población de 3,3 millones de habitantes.
Lituania es hoy una república parlamentaria con un jefe del Gobierno —el primer ministro— y un jefe del Estado —el presidente— que designa al primer ministro. El Parlamento es un órgano legislativo unicameral, compuesto por 141 diputados elegidos por sufragio universal directo. El presidente de Lituania es una mujer, Dalia Grybauskaité, reelegida para un segundo período de 5 años en 2015 para un segundo mandato de 5 años. En si interior hacen vida diversos partidos políticos El país está dividido en 60 municipios cuyos alcaldes son elegidos por sufragio directo.
Empobrecida en sus años de socialismo, desde su independencia se propuso rescatar su cultura, desde la lengua hasta la reconstrucción de bibliotecas, museos, iglesias y castillos destruidos por los soviéticos. También consolidar su democracia y adoptar una economía de mercado.
Desde su independencia en 1991, el Estado lituano ha hecho grandes reformas económicas: Pasó a ser el 141° Miembro de la Organización Mundial de Comercio OMC en el año 2001. En 2004 ingresó a la Unión Europea y a la OTAN. En 2015 abandonó la Lita como moneda y adoptó el Euro. Hoy su economía es la No. 86 del mundo por volumen de PIB. Su deuda pública es de 39,4% del PIB.
En cuanto al Índice de Desarrollo Humano o IDH, que elabora las Naciones Unidas para medir el progreso de un país y que en definitiva nos muestra el nivel de vida de sus habitantes, indica que los lituanos se encuentran en el puesto 36. Se encuentra en el 14º puesto de los 190 que conforman el ranking Doing Business, que clasifica los países según la facilidad que ofrecen para hacer negocios. Hoy día, la tasa de apertura comercial supera el 123%. En 2017 recibió 595 millones de dólares de Inversión Extranjera Directa (IED)en 39 proyectos que crearon más de 5.000 nuevos empleos. A finales de 2017 acumuló un stock IED de 17.576 millones de dólares.
En cuanto al Índice de Percepción de la Corrupción del sector público en Lituania ha sido de 59 puntos, así pues, se encuentra en el puesto 38 del ranking de percepción de corrupción formado por 180 países.
Venezuela vs Lituania
El PIB per cápita es el producto interno bruto dividido por la población a mitad de año. El PIB per cápita es un muy buen índicador del nivel de riqueza de la población de un país. En el gráfico está expresado en US dólares a pecios actuales (corrientes).
Para el año 1995, el PIB per cápita de Venezuela fue de 3.560 dólares, el doble de Lituania de 1.845 dólares según datos del Fondo Monetario Internacional (FMI). A partir del 2002, EL PIB per cápita de Lituania comenzó a ser mayor que el de Venezuela y cierra el año 2018 con un PIB per cápita de 19.534 dólares, 6 veces mayor que el de Venezuela de 3.168 dólares, que incluso cayó por debajo del valor del año 1995.
En proyecciones del FMI, para el año 2020 el PIB per cápita de Lituania alcanzaría los 23.015 dólares, 8,6 veces mayor que el de Venezuela, que continuaría cayendo a 2.617 dólares en 2020.
Desde el año 2000 a 2018 el PIB per cápita de Lituania pasó de 3.297 dólares a 19.534 dólares, un incremento respecto al año 2000 del 492%. ¡Sencillamente excelente!
La lección del auge de Lituania y el desplome de Venezuela
La razón fundamental del buen comportamiento económico de Lituania desde la disolución de la URSS, fue la drástica transformación de su antigua economía socialista a economía de mercado con paz social gracias a la democracia representativa. Lituania es hoy un país con un reducido riesgo político y económico, y con una tasa de crecimiento que se sitúa entre las más altas de Europa. En la actualidad la República de Lituania tiene un alto nivel de vida como cualquier nación moderna, y tras un siglo de inestabilidad económica como consecuencia de distintos conflictos bélicos y a la ocupación soviética, el país báltico ha entrado a formar parte del club de los países desarrollados según el FMI.
Caso contrario al de Venezuela, que por décadas fue el país más rico de latinoamérica y unos del mundo, pasó a ser unos de los tres países más pobres del continente americano en 2018, tras 20 años de gobiernos socialistas.
Ver también Venezuela termina el 2018 entre los tres países más pobres del continente americano
La comparación entre los dos países ilustra a la perfección el fracaso de la receta venezolana. Haber hecho precisamente lo contrario de lo que hizo Lituania, un país con muchísimos menos recursos naturales que Venezuela.
Mientras Lituania salió de la miseria gracias a la economía de mercado y la democracia, Venezuela destruyó la democracia instaurando una tiranía, adaptando la economía socialista, logrando llevar a la miseria a la nación venezolana (lapatilla.com)