Al infinito y más allá… Los precios de los alimentos se montaron en el “cohete”

Foto: Alberto Briceño

 

La marabina Luisa Hernández salió, ayer, al supermercado con lo último que le quedaba de la quincena del 31 de diciembre. Ella sabía que los precios no serían los mismos, ante una hiperinflación que pisó a fondo el acelerador de un carro que se rehúsa a retroceder.

Por: Isaac Rubio | Panorama





“Año Nuevo, precios nuevos” fue lo que le dijeron a Luisa. Regresó en la tarde al supermercado, pero quedó sorprendida al darse cuenta de que el valor de los alimentos aumentó cada hora, como el dólar paralelo, guía por la cual fluctúan varios productos en los comercios.

El kilo de tomates se puede encontrar en los supermercados y en mercados municipales en BsS 3 mil y el de papas, en BsS 2.800, mientras el sueldo mínimo se mantiene en 4.500 bolívares soberanos, equivalente a medio Petro.

“Si antes era un lujo comprar la comida, ahora lo es más. En mi casa sumamos el sueldo de mi esposo y el mío, pero no alcanza. Esto es terrible”, testificó Rita González, de La Rotaria.

El valor de la zanahoria llega los 3 mil bolívares y el de la cebolla sobrepasó los 2.500 bolívares.

La proteína también se disparó. La carne con corte bistec sobrepasó los 2.000 bolívares, la molida llega a los BsS 2.600, al tiempo que la costilla se en encuentra ligeramente menos. Un cartón de huevos tiene un valor de 3.500 bolívares.

El litro de aceite roza los 4 mil bolívares, cuando hace tan solo tres días, apenas superaba los BsS 3 mil.

“Con lo que me envían unos familiares del exterior es que yo logro comprar algunas cositas, pero ya me olvidé de la carne porque solo me alcanza para un kilito en el mes”, contó Rubia Cáceres, de Nueva Democracia.

El paquete de 400 gramos de leche es posible conseguirlo en 2.400 bolívares, es decir, en dos paquetes se gasta la cantidad de 4.800 bolívares, unos 100 bolívares menos del sueldo básico.

Otros productos lácteos como el queso semiduro vale BsS 4.500 y el pasteurizado en BsS 6.350. El jamón de pierna llegaba, ayer, a los 8 mil bolívares.

Los carbohidratos, rubros que imperan en la canasta, como la pasta, ya alcanzan los BsS 1.000 por un kilo.

La muy buscada margarina de medio kilo cuesta 1.700 bolívares y la salsa de tomate llegó a los BsS 2.300.

Denuncian que en algunos hipermercados y supermercados siguen implementando las compras condicionadas o por “combo”. Este mecanismo, aseguran, ocasiona que los gastos se incrementen al adquirir “alimentos que no son necesarios”, dijo el sureño Hernán Rivas.

Sigue escaseando la harina de maíz precocida y cuando se encuentra, la expenden en algunos comercios, se encuentra desde BsS 1.000.

En otros supermercados ya no mostraban en anaqueles productos de la canasta alimentaria, salvo sal y refrescos. Tampoco se veían frutas, excepto manzanas que tienen un valor, por kilo, de casi 10 mil bolívares.

Un lavaplatos de 250 gramos vale 2.900 bolívares.