Una larga y millonaria investigación destapa la infidelidad de Jeff Bezos

Una larga y millonaria investigación destapa la infidelidad de Jeff Bezos

 

 





Jeff Bezos, el hombre más rico del mundo, se ha visto obligado a reconocer el final de su largo matrimonio, un día antes de que saliera a la luz su relación paralela con la presentadora y productora Lauren Sánchez, esposa de un íntimo amigo: el agente de actores Patrick Whitesell, publica ABC. Tras 25 años casados y en un comunicado conjunto publicado el pasado miércoles, Jeff y McKenzie Bezos anunciaban su divorcio de la mejor manera y sin ahondar en los auténticos motivos. Ayer, la revista «National Enquirer» publicaba en exclusiva fotos y ardientes mensajes de texto, en los que Bezos declara su pasión por Sánchez: «Te quiero oler, te quiero respirar. Quiero mostrarte mi cuerpo, besarte los labios, te amo. Estoy enamorado de ti», reza uno de ellos.

Al parecer, el fundador y propietario de Amazon, padre de cuatro hijos y quien se describe a sí mismo como un «hombre de familia», viajaba con su amante a destinos exóticos a bordo de su jet privado y le enviaba mensajes subidos de tono y selfies eróticos, además de mantener citas secretas en fincas y hoteles. Su relación, que comenzó ocho meses atrás, se coronó el pasado domingo con Bezos y Sánchez caminando por la alfombra roja de los Globos de Oro.

Durante cuatro meses, la revista «National Enquirer», afín al presidente de EE.UU. Donald Trump -declarado enemigo de Bezos, sobre todo debido a su condición de propietario de «The Washington Post»-, ha estado rastreando la relación del empresario con Lauren Sánchez en cinco estados estados del país y a lo largo de más de 60.000 kilómetros. Les han seguido en aviones privados, elegantes limusinas, paseos en helicóptero, caminatas románticas y cenas íntimas. Entre los detalles escabrosos del reportaje, se cuenta cómo en una ocasión los amantes se encontraron a escondidas en una habitación de un hotel de Boston, mientras en otra estaba la familia Bezos. En suma, una millonaria investigación periodística, sobre la que algunos ven la alargada sombra de Trump.


Un imperio en juego

Laura Sánchez y Jeff Bezos

 

Pese a que en el comunicado de ruptura de Jeff y McKenzie Bezos se insiste en que «vamos a seguir compartiendo nuestra vida como amigos», se aventura un divorcio no tan civilizado, que podría acabar entronizando a Mackenzie como la mujer más rica del planeta si accede a la mitad de la fortuna -unos 130.000 millones de euros- de su todavía marido. Se casaron en 1993 en régimen de gananciales -reconocido por el estado de Washington, donde tienen su residencia- y al parecer sin acuerdo prenupcial.

Fuentes cercanas a Bezos aseguran que comenzó su relación con Lauren el pasado mes de junio, cuando ya se había separado de su esposa, algo que el «National Enquirer» ha tratado de desmontar con su reportaje. La revista afirma tener fotos tan personales, que no se pueden reproducir. Sánchez, por su parte, estuvo hasta hace dos meses unida a Patrick Whitesell, uno de los hombres más poderosos de Hollywood, con quien tiene dos hijos. «Su matrimonio ha tenido varias idas y venidas en los últimos años. No ha sido una sorpresa su separación», afirman amigos de la presentadora.

Bezos y Sánchez se conocieron durante el rodaje de un vídeo para la compañía Blue Origin, que ella dirigía. Su pasión por la aviación les unió y, durante años, los dos matrimonios compartieron animadas veladas en Seattle.

El vicepresidente de Amazon, Drew Gerdeber, ha asegurado a través de un comunicado que Bezos se mantiene, pese a su complicada situación personal, concentrado en su negocio.