Habitantes de Paracotos instan a los militares a unirse al pueblo este #23Ene

Habitantes de Paracotos instan a los militares a unirse al pueblo este #23Ene

Foto: AVN

 

Vecinos de la parroquia mirandina Paracotos instaron mediante un comunicado a las fuerzas militares a unirse a la manifestación junto al pueblo de Venezuela este próximo miércoles 23 de enero.

A continuación, la misiva:





Señores, ciudadanos venezolanos:
Comandante Zambrano Rivas y Capitán Tarazona Ortega.
Jefes de los comandos ubicados en nuestra Parroquia Paracotos.
Con ustedes, a todos los militares bajo sus órdenes en nuestra parroquia.
Presentes.-

Nosotros, habitantes todos del pueblo de Paracotos, tenemos a bien comunicarnos esta vez con la finalidad de solicitar su acompañamiento en esta
inigualable ocasión, cuando se conmemora y celebra la jornada cívico-militar del 23 de enero de 1958 que puso fin a la dictadura anterior.

Hoy, el pueblo venezolano en la calle, en varias ciudades y pueblos de nuestro país y del mundo, nos botamos al pavimento, nuevamente, a insistir en el reclamo por la libertad. Pero esta gesta ciudadana, cívica, de hoy, no puede ni debe encontrarlos a ustedes ajenos a los acontecimientos. También son copartícipes de esta gesta; tienen que serlo; están obligados a serlo. No sólo porque ustedes sufren directamente los flagelos de la tiranía, ahora usurpadora del poder, según lo ha manifestado sin ambages la Asamblea Nacional, electa por votación universal, directa y secreta, última votación verdaderamente válida y democrática en el país, sino porque ustedes tienen también familia padeciendo en sus casas los rigores de esta situación política despótica, de sometimiento ciudadano, como lo ha reconocido buena parte del mundo. ¿Pueden ustedes sustraerse, quedarse al margen, o, peor, tratar de evitar el curso de la historia?

¿Qué les solicitamos? Algo aparentemente sencillo, ético y legal: cumplan y hagan cumplir, junto a nosotros, la Constitución vigente en Venezuela. Ésa por la cual todos nos regimos, después de dar nuestra aprobación, y que ha sido desconocida permanentemente en todo su articulado por el régimen impostor, el que se ha separado hace mucho de la vida democrática y ha puesto de lado los intereses del país, los de sus ciudadanos, por oscuros deseos internacionales. La Fuerza Armada de Venezuela, una vez más, debe cumplir el rol que le corresponde en la recuperación, junto a la sociedad civil, del orden constitucional, del Estado de Derecho.

No son sólo los artículos 233, 333 y 350, los que son irremediable y permanentemente invocados para la exigencia de su cumplimiento, con base en: la falta absoluta del presidente, el deber ciudadano de hacer cumplir los mandatos de la Constitución, así como el desconocimiento del régimen usurpador, quebrantador de los principios democráticos y los derechos humanos, sino que, en particular, la Fuerza Armada Nacional, por instrucciones literales de nuestra carta magna, está en la obligación de colocarse “al servicio exclusivo de la nación y en ningún caso al de persona o parcialidad política alguna”, según reza en el artículo 328 constitucional. Además, como establece el artículo 5, ubicado en los Principios Fundamentales: “La soberanía reside instransferiblemente en el pueblo”. Es ésta la Constitución. Es la única orden a cumplir por todos los ciudadanos, sin distingo alguno de ser civil o militar.

Hermano militar venezolano, únete con la sociedad civil que lucha día a día por la recomposición del país en paz, para terminar de una vez por todas de rescatar el bello terruño que nos han robado. Es tu obligación. No hay orden superior a la emanada por el dictamen de la legalidad, de la conciencia y de la exigencia popular, ya que, hace más de un quinquenio, más del 80% del país rechaza la política de destrucción de la nación que ha avanzado ante la perplejidad y el sufrimiento de todos por igual. Hagamos todos juntos, civiles y militares, que “muera la opresión”.

Hermano militar, únete a la lucha irrefrenable por la libertad del país. Una muy cara idea de los fundadores militares, junto a los civiles, de la patria: Bolívar, Sucre, Miranda, Páez, Urdaneta, Arismendi, Ribas… Sólo juntos podemos volver a hacer nuestra a Venezuela.

Ayer, 21 de enero, a partir de las cinco de la tarde, los habitantes de Paracotos, en el Estado Miranda, comenzaron a congresarse, masiva y espontáneamente, en frente de la iglesia de la popular parroquia, con el objeto de llevar a cabo una Asamblea de Ciudadanos, cuyo propósito era preparar las acciones conducentes a la actividad de protesta del 23 de enero, convocada por la Asamblea Nacional y su presidente: Juan Guaidó.

Las intervenciones estuvieron lideradas por habitantes del pueblo, encabezadas por Jesús Camacaro (Chúo) y el profesor William Anseume (Presidente de la Asociación de Profesores de la USB). Se aprobaron varios planteamientos esgrimidos a viva voz por los participantes: acudir masivamente a la actividad programada en Caracas este 23 de enero, para lo cual se dispusieron varios vehículos alquilados y se ofrecieron otros vecinos a llevar y traer a los manifestantes del pueblo; para quienes se queden en Paracotos, se levantaron las manos en señal de aprobación en cuanto al hecho de permanecer en las calles del pueblo y entregar en los comandos de la Guardia Nacional una comunicación, que fue leída, votada y firmada por más de trescientas personas, en un pueblo pequeño, alentando a los militares a defender la Constitución Nacional y a acompañar a los ciudadanos en procura de la restitución más inmediata del Estado de Derecho en Venezuela.

Por otra parte, y ante la rapidez de la convocatoria de esta importantísima actividad, no se pudo contar con la presencia física de algún diputado de la Asamblea Nacional o algún destacado dirigente político; sin embargo, fueron emocionantes los discursos de Camacaro y Anseume. La presencia de los diputados se hizo sentir por la vía telefónica y así intervinieron: Dignora Hernández (Monagas), Biagio Pilieri (Yaracuy), Luis Barragán (Aragua), todos integrantes de la fracción 16 de julio de nuestra Asamblea Nacional y Américo de Gracia (Bolívar). Del mismo modo se contó con la intervención alentadora, elocuente, emocionante, de la dirigente política nacional María Corina Machado.

Los ciudadanos se estimularon a tomar la palabra, a exigir democracia, constitucionalidad, Derechos Humanos y libertad; así como protección y cuido en las manifestaciones para taratar de evitar los embates de la represión. Se le dio, asimismo, todo el apoyo a las maestras y profesores en sus reclamos laborales, ya que manifestaron estar siendo acosados para obligar a impartir clases el 23 de enero, cosa a la que rotundamente se niegan.

A los gritos de ¡libertad! se terminó esta importante jornada cívica en Paracotos, pueblo que quedó entusiasmado para participar arduamente en la manifestación del 23 de enero.