Las caras de la cúpula militar que sostiene a Nicolás Maduro

Los llamados a la Fuerza Armada de Venezuela no cesan. La oferta de amnistía del presidente encargado, Juan Guaidó, para que la cúpula militar de su país retire el apoyo a Nicolás Maduro han sido repetidos por el senador republicano Marco Rubio, hace apenas unos días por John Bolton, asesor de Seguridad Nacional, quien, incluso, ofreció suspender las sanciones que Estados Unidos ha impuesto sobre algunos de ellos.

El Comercio





Y finalmente el lunes por el mismísimo presidente Donald Trump, quien les reiteró la amnistía, pero los amenazó con “perderlo todo” si no se ponen del “lado correcto de la historia”.

 

 

Fue un discurso de unos 30 minutos en la Universidad Internacional de la Florida y dirigido a la comunidad venezolana en el que el mandatario los exhortó a que permitan la entrada de la ayuda humanitaria y permitan la transición democrática.

Todos se apresuran en asegurar a Maduro que su tiempo se acabó, pero, transcurridas varias semanas en las que unos 50 países -el último Japón- han apoyado a Guaidó y millones de venezolanos han salido a las calles en repudio al régimen de Maduro, este se exhibe atrincherado sobre el último bastión que tiene bajo control, la Fuerza Armada venezolana, en especial el Alto Mando Militar.

En su mínima expresión, se trata de los seis funcionarios militares de mayor rango en el país, los comandantes de cada componente de la Fuerza Armada –Ejército, Armada, Aviación, Guardia Nacional–, del Comando Estratégico Operacional y el ministro de la Defensa.

Estos encabezan el entramado de otros 2.000 generales que ha nombrado Maduro durante sus años de mandato, entre los cuales se cuentan varios cientos a los que se les ha otorgado el control de sectores económicos como la actividad portuaria, la explotación petrolera, la extracción de oro y, más recientemente, la distribución de los alimentos del país.

Venezuela’s Defense Minister Vladimir Padrino Lopez attends a news conference in Caracas, Venezuela, February 19, 2018. REUTERS/Manaure Quintero NO RESALES. NO ARCHIVES

Según Transparencia Venezuela, al menos 60 de las 576 empresas que maneja el Estado están dirigidas por militares –entre ellas Petróleos de Venezuela (PDVSA) y una especie de ‘espejo’ militar llamado Camimpeg–.

La organización Control Ciudadano ha contabilizado, con nombre y apellido, a 500 funcionarios militares que participan en la Gran Misión Abastecimiento Soberano, con la que Maduro delegó desde la producción hasta la distribución de los alimentos en el país.

“Hugo Chávez ejercía directamente su liderazgo sobre la Fuerza Armada, no necesitaba cortapisas, y su ascendencia sobre los militares era total e indiscutible. Ese no es el caso de Maduro, que ha podido gobernar permitiendo o fomentando la creación de feudos que se han repartido el poder económico”, explica la experta en defensa y abogada Rocío San Miguel.

“Eso continúa en el plano de los negocios legales, como con los negocios ilegales”, puntualiza a “El Tiempo”.

Consciente de la posibilidad de un momento como este, de altísimo descontento y reto a su poder político, Maduro se ha rodeado del mismo alto mando durante los últimos dos años, aunque era tradición la rotación anual de los principales comandantes conforme avanzan las promociones.

Excepcional ha sido la duración del general Vladimir Padrino López en el Ministerio de Defensa –cuatro años–, mientras que los comandantes de la Aviación y la Armada son los que tienen menos tiempo en los cargos.

Se trata de funcionarios que no solo estuvieron muy cerca de Hugo Chávez, sino que también han aprobado y participado en seminarios de ideologización ofrecidos en Cuba o Venezuela por funcionarios cubanos. Estas son las patas de la mesa que aún sostiene a Maduro:

Vladimir Padrino López, Ministro de Defensa

Un piloto ruso le explica al ministro de Defensa de Venezuela, Vladimir Padrino, las características del avión Tupolev 160 con un modelo a escala. (Foto: Reuters).

Tiene cuatro años en el cargo, algo nunca visto en la historia venezolana. Egresado de la promoción de militares de 1984, su ascenso dentro del chavismo ocurrió a partir de su negativa a plegarse al golpe de Estado que se dio contra Hugo Chávez en abril del 2002 como comandante del batallón de infantería Simón Bolívar, en la capital venezolana.

Su lealtad fue pagando en nombramientos en tiempos de Chávez, pero llegó al ministerio de la mano de Maduro y se dice que es el hombre que realmente lo mantiene en el poder.

Tiene ascendencia sobre los soldados y respeto como interlocutor político. En su temprana formación recibió entrenamiento en la Escuela de las Américas, en EE. UU., pero ya en la madurez también recibió la unción como militar de confianza por parte de Fidel Castro. Es un emisario clave del régimen venezolano en sus relaciones con Rusia.

Pedro Alberto Juliac Lartiguez, comandante general de la Fuerza Aérea

Pedro Alberto Juliac Lartiguez, comandante general de la Fuerza Aérea. (Foto: AFP).

También cuenta solo ocho meses en el alto mando, aunque ha ocupado cargos de mucha confianza como comandante general de la Aviación Militar –nombrado por el entonces presidente Hugo Chávez– y responsable del manejo de fondos y presupuesto de la comandancia general de la Aviación.

Ha viajado a China en representación del régimen de Nicolás Maduro para el equipamiento militar de Venezuela en ese país, y en sus discursos no pierde oportunidad de desplegar su defensa de la ‘revolución bolivariana’.

“Hasta que llegó Hugo Chávez a despertar los ideales de grandeza, de independencia, de igualdad (…). Chávez trajo al presente el concepto verdadero de patria”, dijo en noviembre del año pasado.

Richard Jesús López Vargas, comandante general de la Guardia Nacional

Richard Jesús López Vargas, Comandante general de la Guardia Nacional. (Foto: @lopezvargasr).

Fue nombrado como líder de ese componente en enero de 2018, un día después del operativo que acabó con la vida del insurrecto Oscar Pérez y todos los miembros de su grupo.

Hasta ese momento se desempeñaba como viceministro de Servicios, Personal y Logística del ministerio de Defensa.

Le ha tocado informar a sus superiores de la masiva deserción de guardias nacionales –solo el año pasado informó de la baja a 4.309 miembros de la tropa que simplemente no se presentaron en sus guarniciones– asegurando que estos se encuentran en estado “difuso y colectivo” sin nombrar jamás la causa de semejante huida, apenas señalando que con esta ausencia se ha creado un ambiente de “desobediencia e indisciplina”.

Se le reprocha que no hizo pronunciamiento alguno luego de que el ELN asesinó a tres guardias nacionales en la región de Amazonas a finales del año pasado.

Remigio Ceballos Ichaso, jefe del Comando Estratégico Operacional

Admiral-in-Chief Remigio Ceballos, Strategic Operational Commander of the Bolivarian National Armed Forces attends snipers drills next to Venezuela’s Defense Minister Vladimir Padrino Lopez, during military exercises in Caracas, Venezuela August 26, 2017. Miraflores Palace/Handout via REUTERS ATTENTION EDITORS – THIS PICTURE WAS PROVIDED BY A THIRD PARTY.

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