Jurarle lealtad al presidente interino de Venezuela, Juan Guaidó, no fue suficiente para que el general chavista Hugo Carvajal evitara su captura, este viernes, en un exclusivo barrio de Madrid (España). Así lo reseña eltiempo.com
Agentes federales del Servicio de Inmigración y Aduanas (ICE, Estados Unidos) y de la Guardia Civil capturaron, con fines de extradición, al otrora director de inteligencia del régimen de Hugo Chávez y de Nicolás Maduro.
Carvajal, conocido como ‘el Pollo’, fue sacado de la residencia de su hijo hacia las 9:30 de la mañana (hora colombiana) y ahora se adelantan trámites para enviarlo a Estados Unidos.
Cortes de Nueva York y Florida le siguen procesos por el envío de varias toneladas de coca a través de una red que involucra a altos oficiales del Ejército venezolano, conocida como el ‘cartel de los soles’.
Los uniformados exportaban la droga que recibían de organizaciones colombianas, como las Farc, el Eln, y el cartel del Norte del Valle, que a cambio obtenían refugio y armas.
Eso explica la presencia en el vecino país de narcos de la talla de Wílber Varela, alias Jabón, y de Daniel ‘el Loco’ Barrera. Así mismo, la aparición del nombre de Carvajal en el computador del jefe guerrillero ‘Raúl Reyes’.
Por los nexos narcos, Carvajal ya había sido capturado, en 2014, en Aruba. Sin embargo, su extradición a Estados Unidos se frustró porque alegó tener inmunidad diplomática.
El ventilador
Pero ahora, en manos del gobierno Trump, se espera que empiece a entregar información relevante sobre los otros miembros activos del ‘cartel de los Soles’ y sobre sus otros aliados en el régimen, entre ellos Tareck El Aissami.
A este último, que cumple la doble función de vicepresidente del área Económica y ministro de Industria de Venezuela, Carvajal lo señala de ser narcotráficante y de tener nexos con el grupo terrorista libanés Hezbolá.
Incluso, asegura que hay cómo probar su participación en el saqueo a la estatal petrolera PDVSA y en el negocio de las llamadas cajas Clap, en donde también aparece el colombiano Álex Saab.
De hecho, EL TIEMPO estableció que el propio Carvajal ya ha hecho llegar a Estados Unidos pruebas contra El Aissami y ha hecho saber que posee datos clave sobre las fortunas ocultas de las cabezas del Partido Socialista Unido de Venezuela, el partido de Chávez y de la Revolución Bolivariana.
Sobre este capítulo, el otrora poderoso jefe de la inteligencia y contrainteligencia del régimen ha dicho que se deben rastrear dineros en Líbano, Dubái, Hong Kong, Europa y Estados Unidos.
Así mismo, dice tener detalles de la presencia cubana en instituciones venezolanas, especialmente en las Fuerzas Armadas, un tema que inquieta a organismos de inteligencia de Estados Unidos y de Colombia que los señalan de promover labores de espionaje para desestabilizar al gobierno de Iván Duque.
Sobre las Fuerzas Armadas, Carvajal ha dicho recientemente que cerca de un 90 por ciento de ellas ya está en contra de Maduro y que su sublevación sería la única forma de sacar al chavismo del Palacio de Miraflores.
¿Pruebas contra Padrino?
Incluso, manifiesta que tiene pruebas contra el poderoso ministro de Defensa de Venezuela, Vladimir Padrino López, a quien le atribuyen mantener en el poder a Maduro.
De él ha dicho que fue quien llevó a los cubanos a Venezuela e introdujo el cruel sistema de torturas que se les aplican a militares rebeldes, civiles y opositores políticos presos en varias prisiones, especialmente en la temida Ramo Verde, ubicada en Caracas.
Ese tipo de afirmaciones y el video en el que apoya a Guaidó, de febrero pasado, llevaron a Maduro a expulsar a Carvajal del Ejército y acusarlo formalmente de traición a la patria.
Pero toda esta información podría evitar que la justicia de Estados Unidos le imponga una severa condena al exhombre fuerte del régimen venezolano al que acusan de haber introducido más de 5 toneladas de coca a ese país. De hecho, se le rastrean varios bienes en Europa.
Por ahora, Hugo Carvajal está citado este sábado a comparecer ante el Tribunal Superior de España, el cual tiene un plazo máximo de 24 horas para decidir si lo mantiene privado de la libertad mientras se define su extradición o si lo deja en libertad.
Sin embargo, hay que recordar que él mismo pidió -en febrero de 2017, cuando era diputado- que le fuera levantada la orden de detención en su contra para ir voluntariamente a declarar a Estados Unidos.