De país petrolero, a cocalero, por Mitzy Capriles de Ledezma

De país petrolero, a cocalero, por Mitzy Capriles de Ledezma

¿Elecciones con Maduro usurpando el poder? Olvídense de esa quimera. A menos que se hagan como les gusta a los tiranos: a su manera. Con rectoras del CNE controladas, con un REP puyado, con colectivos violentos asediando a los electores en las colas, con un Plan Republica que más bien es un Clan de Maduro, con tolditos rojos para pasar por el cedazo a los ciudadanos sometidos con el perverso Carnet de la Patria, sin observación calificada, salvo aquellos mamarrachos que traen con todos los gastos pagados para que sean “mirones de palos” y alabarderos de la “revolución”.

El que no quiera aceptar esta sentencia, pues bien, que se siente a esperar a ver a Maduro conviniendo realizar elecciones con todas las de la ley, como deben ser las consultas a los ciudadanos en cualquier país verdaderamente democrático, en cualquier parte del mundo.





He podido acompañar a Antonio, a decenas de foros, seminarios, reuniones con jefes de Estados, parlamentarios, encuentros con la diáspora venezolana y cada vez que pasan los meses y Maduro continúa usurpando el poder, me reafirmo en la tesis que él ha vendido defendiendo con una pasión contagiosa. Cuando le preguntan ¿cómo se justifica o explica que, en medio de esta espantosa crisis, Maduro se mantenga en el poder? La respuesta de Antonio es contundente: Maduro es un tirano, y lo secundan mafias.

La elite militar que lo apaña esta más que embarrada en narcotráfico, corrupción y a su vez, junto a Maduro, también tiene responsabilidades en los crímenes de lesa humanidad, perpetrados en estos últimos años. Esos grupos violentos que actúan con licencia para matar, como son los pranes que dirigen sicarios desde las cárceles, los grupos parapoliciales como son los colectivos o los parasindicatos, se apoyan también con los tentáculos de la FARC, del ELN, de las células terroristas de Hezbollah, que como comparsa se mueven al compas de las ordenes de Maduro para acometer todo tipo de villanías contra la ciudadanía.

Basta con recordar lo que hicieron el pasado 23 de febrero en Cúcuta y en Santa Elena de Uairén. Eso fue una mezcla de exterminio con limpieza étnica, todos recordamos con indignación como Maduro trunco el ingreso de la ayuda humanitaria, mientras hacia la señal para que sus huestes dispararan a matar a nuestros pemones. Por todo el prontuario de Maduro, por la caracterización inequívoca que ha hecho la comunidad internacional respecto al régimen que impera en Venezuela, lo que corresponde en esta coyuntura es activar desde ya, lo antes posible, el Concepto de Responsabilidad de Proteger.

Es una tarea que no puede dejar de hacerse en las esferas de la dirección democrática de la oposición, ni tampoco debe seguir siendo demorada en las instancias de los organismos internacionales llamados a confirmar esa cooperación, organizando una fuerza de paz que definitivamente nos ayude, a los venezolanos, a doblegar a esas mafias que han trasformado a Venezuela en un régimen cocalero, después de haber sido un reconocido país petrolero. Vamos pues, a acompañar este 1 de mayo a nuestro presidente legítimo Juan Guaidó, en todo el mundo que se escuche nuestra proclama: Intervención Humanitaria y activar ya, el art. 187 #11CN para desalojar del poder que usurpa el tirano.