El ministro de Relaciones Exteriores de Cuba, Bruno Rodríguez, viajará el martes a Pekín para debatir asuntos bilaterales con su par chino, Wang Yi, en un momento en el que ambos países han reforzado sus relaciones diplomáticas y económicas.
La visita de Rodríguez a China, a invitación de Wang, se prolongará hasta el jueves 30 y en ella ambos titulares de Exteriores analizarán “la marcha de las relaciones bilaterales y asuntos de interés común”, informó este lunes la web estatal Cubadebate, que citó a un portavoz de la cancillería china.
El jefe de la diplomacia de Cuba se encuentra en la recta final de una visita oficial de tres días a Moscú, en la que se ha reunido con su homólogo ruso, Serguei Lavrov.
Ambos cancilleres denunciaron las “medidas coercitivas unilaterales” de Estados Unidos contra los dos países, en especial el embargo contra la isla, y la política de Washington hacia Venezuela.
Se espera que Rodríguez también busque en Pekín un mensaje de apoyo frente al embargo estadounidense y también acerque posturas con su homólogo chino en lo relativo a Venezuela, ya que ambos países apoyan a Nicolás Maduro frente a Juan Guaido, al que reconocen más de 50 países.
Cuba y China mantienen unas estrechas relaciones políticas y económicas, en las que el país asiático destaca como uno de los principales aliados de la isla y su segundo socio comercial.
El pasado noviembre el presidente de Cuba, Miguel Díaz-Canel, realizó una visita -acompañado por el canciller Rodríguez- a Pekín, donde se reunió con su homólogo chino, Xi Jinping, y ambos acordaron impulsar los lazos “de amistad” que unen a ambas naciones gobernadas por un sistema de partido único comunista.
Cuba fue, en 1960, el primer país latinoamericano en establecer relaciones diplomáticas con la República Popular China, que se había creado en 1949.
China, por su parte, ha apoyado tradicionalmente a Cuba en los foros internacionales como Naciones Unidas, en los que ha pedido el levantamiento del embargo estadounidense.
En ese sentido, el gobierno de la nación asiática condenó las nuevas medidas de endurecimiento dispuestas por la administración de Donald Trump contra Cuba, entre ellas, la activación el pasado 2 de mayo del título III de la ley Helms-Burton que permite demandas a compañías de terceros países vinculadas a bienes expropiados en la Revolución cubana.
EFE