Un acupunturista no pudo insertar correctamente las agujas para tratar el dolor de hombro, perforando los pulmones de una mujer.
Por Stuff
Traducción del inglés al castellano por lapatilla.com
Una investigación de la Comisión de Salud y Discapacidad de Nueva Zelanda encontró que el acupunturista, que no fue nombrado, había violado el Código de Salud y Derechos de los Consumidores de Servicios de Discapacidad en una decisión publicada el lunes.
La mujer de 33 años estaba recibiendo tratamiento por una lesión en el brazo y la muñeca. En la cita en marzo de 2018, le dijo al practicante que tenía dolor en el área del hombro y el cuello y falta de aliento.
Ella dijo que el acupunturista no le contó sobre la colocación de las agujas cerca de sus pulmones y el riesgo de perforarlas.
El acupunturista dijo que el procedimiento y el riesgo de perforación pulmonar se explicaron verbalmente, pero no se registraron en las notas del paciente.
No se obtuvo el consentimiento por escrito del paciente.
Cuando se insertaron las agujas, la mujer, que pesaba 45 kilogramos, dijo que era dolorosa y que se sentían “extremadamente profundas”.
Se dejaron las agujas durante 30 minutos y el profesional las rotó antes de retirarlas.
Cuando salieron, el paciente dijo que sintió un dolor repentino en el pecho en el lado derecho y dificultad para respirar.
El acupunturista retiró las agujas de inmediato y proporcionó tratamiento adicional.
La mujer dejó la práctica a las 2.30 p.m. y se sintió “muy incómoda”.
Mientras descansaba en casa, su pecho izquierdo era doloroso y su pecho derecho estaba entumecido. Esa noche, su esposo la llevó a un centro médico y luego la derivaron a un departamento de emergencias local.
Los médicos le diagnosticaron dos pulmones perforados.
El comisionado de Salud y Discapacidad, Anthony Hill, descubrió que el profesional había violado el código al no tener el cuidado adecuado en el tratamiento, al no proporcionar información sobre los riesgos y al no reconocer los síntomas de los pulmones perforados.
Hill recomendó que el profesional verifique su provisión de información a pacientes anteriores e informe al HDC sobre los resultados y los cambios realizados.
También recomendó que el practicante realice más capacitación en técnicas de punción e informe con evidencia de finalización.
Hill aconsejó a la Autoridad de Normas de Acupuntura de Nueva Zelanda y Acupuntura Nueva Zelanda que compartieran el caso con los miembros “como una oportunidad de aprendizaje”.
En respuesta al hallazgo de HDC, la acupunturista dijo que “sentía mucho” por las neumomotoras (pulmones colapsados) que sufría el paciente.
Ella entendió que había fallado en alcanzar el estándar requerido para el consentimiento informado y entendió que se debería considerar una inserción más superficial o una aguja más suave para las personas con un índice de masa corporal bajo.
La paciente dijo que si hubiera sabido los riesgos, habría ido al hospital de inmediato, en lugar de quedarse en casa, con dolor, durante horas.
Ella dijo que todavía estaba sufriendo los efectos del colapso pulmonar.
Una portavoz de HDC dijo que era raro que se nombrara a practicantes individuales que violaban el código.
Al considerar si nombrar a un profesional, el comisionado consideró si el interés público superaba el daño potencial al proveedor.
“Es un equilibrio entre hacer que los proveedores rindan cuentas y tener un sistema que aliente a las personas a compartir y aprender de sus errores, lo que hace que el sistema sea más seguro para todos”.