Una multitudinario cabildo público en La Paz rechazó este jueves la candidatura del presidente de Bolivia Evo Morales, que contenderá por un cuarto mandato en las elecciones del próximo 20 de octubre, y recordaron el referendo de 2017 que rechazó su repostulación.
“Esta convocatoria multitudinaria está demostrando que el pueblo boliviano tiene algo que no tienen los políticos del gobierno que es dignidad y convicción democrática”, afirmó en un discurso Waldo Albarracín, rector de la estatal Universidad Mayor de San Andrés y presidente del colectivo ciudadano opositor ‘Consejo Nacional de Defensa de la Democracia’ (Conade).
Este consejo movilizó a diferentes instituciones privadas y a la población para manifestarse en contra de la candidatura de Morales, en el poder desde 2006, para defender un referendo de febrero de 2017 a través del cual los bolivianos se opusieron al deseo de Morales de ir a un cuarto mandato para el periodo 2020-2025.
Sin embargo, el oficialismo logró a fines de 2018 que el Tribunal Constitucional habilitara a Morales para participar en la elección presidencial, con el argumento que era su derecho humano hacerlo nuevamente.
En el cabildo, similar a otro que se realizó hace una semana en Santa Cruz (este), miles de asistentes decían a grito pelado: “¡Democracia sí, dictadura no! ¡democracia sí, dictadura no!” y portaban cientos de banderas bolivianas rojo, amarillo y verde.
En la concentración, que es simbólica, los asistentes también demandaron iniciar un juicio de responsabilidades a Morales, por considerar que está entregando la riqueza del litio del suroeste del país a una empresa alemana.
También demandaron anular unas normas legales del gobierno, que aseguraron, incentivaron la quema de tierras para ampliar la frontera agrícola y que ocasionaron incendios en el Bosque Chiquitano, en este del país, donde en semanas pasadas se consumieron 3,9 millones de hectáreas.
Otro cabildo en la ciudad de Cochabamba, centro, también se pronunció en contra de la candidatura presidencial y llamó a sus habitantes a darle un voto castigo.
AFP