Bolivia vivió un día de paros por fraude electoral que pone a Evo Morales en entredicho

Bolivia vivió un día de paros por fraude electoral que pone a Evo Morales en entredicho

Estudiantes universitarios marchan en contra de los resultados de las elecciones del domingo pasado con un cartel que dice “Evo lacayo de Maduro y Castro”, refiriéndose a Evo Morales, Nicolás Maduro y Raúl Castro, en La Paz. Foto por AIZAR RALDES / AFP

 

Bolivia vivió este viernes una jornada de paros para denunciar un fraude electoral a favor del presidente Evo Morales, quien retó a la oposición y a la comunidad internacional a que lo demuestre “voto a voto”.

Los paros se sucedieron en las principales ciudades de Bolivia, como La Paz, sede de Gobierno y del Parlamento boliviano; Sucre, capital del país; y Santa Cruz, la mayor ciudad y su capital financiera.





Las principales avenidas y carreteras de acceso en las ciudades quedaron cortadas, dejando una imagen inusual de calles medio vacías en un día laborable, sin que hubiera constancia de incidentes relevantes hasta ya anochecido.

La oposición y movimientos cívicos han llamado a la resistencia civil hasta que se acepte una segunda vuelta entre Evo Morales y el opositor Carlos Mesa.

Estudiantes universitarios marchan durante una huelga contra los resultados de las elecciones del domingo pasado en La Paz. Foto por JORGE BERNAL / AFP

 

RESULTADOS DEFINITIVOS

El órgano electoral publicó los resultados al cien por cien, que confirman como vencedor a Evo Morales por el Movimiento al Socialismo (MAS) con el 47,08 % de los votos, frente al 36,51 del expresidente Mesa (2003-2005), de la alianza Comunidad Ciudadana.

Esta diferencia del 10,57 % le es suficiente a Morales para ganar en primera vuelta, aunque con tan solo un 0,57 de margen, la menor diferencia tras haber vencido en tres anteriores elecciones desde 2005 con holgadas mayorías de hasta cerca del 64 por ciento.

La ley electoral exige el 50 % de los votos más uno o el 40 con 10 puntos de ventaja sobre el segundo para vencer en primera vuelta, pero cuando no se logran estos porcentajes, se va a segunda ronda entre los dos más votados.

La presidenta del órgano electoral, María Eugenia Choque, comparecía ante los medios por primera vez desde el miércoles, para garantizar que están abiertos a la auditoría que reclaman organismos como Naciones Unidas, la Organización de Estados Americanos y la Unión Europea.

Un partidario del candidato de la oposición boliviana Carlos Mesa bloquea una avenida en Santa Cruz, Bolivia, como protesta contra el anuncio del tribunal electoral que confirma al presidente Evo Morales como ganador del voto presidencial. Foto por DANIEL WALKER / AFP

 

MORALES Y MESA

Morales en un acto en la región central de Cochabamba, retaba a estos organismos, y a países que como Argentina, Brasil, Colombia y Estados Unidos dudan de los comicios del pasado domingo, a que demuestren el fraude “voto por voto”.

“Aquí hay un ganador en la primer vuelta”, defendió ante sus seguidores, a los que alertó de que los opositores “buscan muertos para echarnos la culpa” con las movilizaciones que se suceden desde el pasado lunes.

A los bloqueos se sumó Mesa en las calles de La Paz para arengar a los suyos: “No nos movemos, vamos a ir a la segunda vuelta electoral”.

“Vamos a trabajar lado a lado en estas manifestaciones, en estos bloqueos y en estos paros”, aseveró.

Las protestas suceden desde que el lunes el órgano electoral difundió un escrutinio provisional que cambiaba radicalmente la previsión de voto a favor de Morales, sin opción de segunda ronda.

La oposición ha mostrado una serie de pruebas documentales de manipulación de actas de votación, que el Gobierno se encarga rápidamente de desmentir.

Una pareja cruza una calle cuyo pavimento dice “Fraude electoral” durante una huelga contra los resultados de las elecciones del domingo pasado en La Paz. Foto por JORGE BERNAL / AFP

 

LA TENSIÓN SIGUE

Al menos 87 personas fueron detenidas y 29 resultaron heridas en los disturbios en lo que va de esta semana, según datos oficiales.

En ciudades como Santa Cruz, de más de millón y medio de habitantes, se vieron largas colas en supermercados para aprovisionarse ante el temor a un desabastecimiento, que las autoridades niegan.

La liga de fútbol está paralizada y se cancelan numerosas actividades culturales y de ocio, como varios conciertos en La Paz para el fin de semana.

Embajadas como la de España han advertido a sus nacionales para que eviten verse inmersos en los incidentes.

Esta noche están convocadas caceroladas para hacer sonoro el pedido de una segunda vuelta electoral.

EFE