Para la embajadora en Bélgica, Mary Ponte, las naciones del mundo y los organismos internacionales deben estar claros que el primer paso para buscar solucionar la migración de venezolanos corresponde a la salida de Nicolás Maduro del poder, y que hacia allá deben orientarse todos los esfuerzos.
La representante diplomática de Venezuela ante Bélgica, agradeció asimismo “el interés demostrado por las naciones europeas y los organismos internacionales en la búsqueda de soluciones ante el problema que se confronta con la crisis de refugiados y migrantes de Venezuela, aunque sin dejar de destacar que los organismo internacionales deben avocarse a la solución de la problemática real que es la violación de los derechos humanos de un gobierno usurpador y de generar mecanismos de solución ante la problemática raíz que es la narcotiranía, para de esta forma poder frenar el éxodo de venezolanos”.
Durante lunes y martes, la Conferencia Internacional de Solidaridad sobre la Crisis de Refugiados y Migrantes de Venezuela envió un mensaje de apoyo a los refugiados y migrantes de Venezuela así como a sus países y comunidades de acogida en América Latina.
Auspiciada por la Comisión Europea, el Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Refugiados y el Director General de la OIM, se destacó en este marco el objetivo fue crear conciencia acerca de esta crisis, y los esfuerzos de los países y comunidades que los acogen. También se analizaron las buenas prácticas y los logros de los países de acogida, se confirmó el apoyo internacional para una respuesta regional coordinada y se hizo un llamado a una alianza global e inclusiva en donde la solidaridad y la responsabilidad sean compartidas por la comunidad internacional en su totalidad pero también entre los sectores público y privado.
Destacó Ponte que en este contexto “se reconoció que la severa y complicada crisis política, socioeconómica y de derechos humanos en Venezuela ha producido una de las más serias situaciones de desplazamiento en todo el mundo. El flujo de personas continúa constante mientras que los recursos y medios de financiamiento se encuentran muy por debajo de las necesidades de esta población en minusvalía”.
Por otra parte, los participantes en la conferencia de Bruselas pusieron de relieve la necesidad de un mecanismo de cooperación que involucre a los Estados donantes, instituciones internacionales financieras y a otros actores relevantes.
Aclaró la embajadora Ponte que “de acuerdo a algunas cifras suministradas por el Coordinador Especial de la OEA para los refugiados Venezolanos, David Smolansky, la crisis humanitaria es de tal dimensión que ha avasallado la capacidad asistencial de los países receptores. De acuerdo a otras cifras suministradas por el Coordinador Smolansky más 1.1 millones de niños refugiados venezolanos necesitan atención, 61% de las migrantes venezolanas embarazadas presentan embarazo de alto riesgo, 20% de las refugiadas embarazadas son menores de edad, 70% de las mujeres que dan a luz en Cúcuta y Boavista son venezolanas, entre otras cifras”.
Durante la conferencia se anunció la donación de 120 millones de euros por parte de distintas delegaciones, además de los 30 millones de euros que donará la Unión Europea.
Es el sentir común de los asistentes a la conferencia de Bruselas que la solución de esta grave crisis pasa por el cese de La usurpación y un cambio político en Venezuela.
Nota de prensa