Una adolescente que fue violada repetidamente por su propio padre desde la edad de seis años ha hablado sobre su horrible abuso.
Por The Sun
Traducción libre del inglés por lapatilla.com
Shannon Clifton, que dio a luz al bebé de su vil padre de 13 años, dice que quiere ayudar a otros a ver “la luz al final del túnel”. La joven de 19 años está reconstruyendo su vida después de sufrir un tratamiento horrible a manos de su padre, Shane Ray Clifton.
Brave Shannon, de Derby, fue violada hasta cuatro veces al día durante ocho años de abusos que le robaron su infancia. El horrible abuso solo llegó a su fin cuando Shannon tenía 14 años después de que Shane Ray Clifton, de 36 años, fuera encarcelado por 15 años en 2015.
Pero desde entonces Shannon se sorprendió al descubrir que la sentencia del antiguo binman se había reducido a diez años. La estudiante, que valientemente renunció a su derecho al anonimato, contó cómo se fue a vivir con su padre, de cinco años, cuando sus padres se separaron.
Ella dijo: “Fue agradable al principio, pero él comenzó a ser abusivo. Volvería a casa de la escuela y él comenzó a pegarme. Me acabo de acostumbrar al final. Entonces comenzó a volverse sexual. Hubo una vez en la habitación del frente en el piso. He tratado de bloquearlo para no recordarlo todo”.
Shannon dijo que solía ir a la escuela “con moretones por todas partes”, pero se le indicó que les dijera a los maestros que había estado jugando peleando con sus primos.
Ella reveló que después de que ella y su padre volvieron a mudarse de casa, las cosas empeoraron aún más al decir: “Cuando era más joven, era solo una o dos veces aquí y allá, pero luego comenzó a ser cada día, y algunas veces al día”.
Shannon dijo que a menudo la violaban antes y después de la escuela y, a veces, en medio de la noche.
Primer embarazo envejecido
Ella dijo: “Solo entendí qué era el sexo cuando tenía nueve años y estábamos aprendiendo sobre eso en la escuela. Me sorprendió porque pensé, eso es lo que mi papá me hace”.
Shannon dijo que su padre la trataba como a su esposa. Regularmente le pedía que limpiara la casa y preparara la cena a partir de los nueve años. Cuando Shannon tenía 11 años, notó que su cuerpo comenzaba a cambiar y se dio cuenta de que estaba embarazada. Ella contó: “Por un tiempo no se lo dije. Pero cuando finalmente se lo dije, me golpeó”.
Se dio cuenta de que tenía alrededor de 28 semanas de embarazo cuando perdió al bebé. En diciembre de 2012, Shannon esperaba otra vez y una vez más perdió al bebé, pero al año siguiente volvió a quedar embarazada de su tercero.
Ella dijo que las cosas llegaron a un punto crítico al final de su embarazo diciendo: “Él acababa de violarme escaleras arriba y yo estaba gritando y llorando. Corrí escaleras abajo y conseguí un gran cuchillo y pensé, si me apuñalo directamente en el corazón, el bebé no morirá, y no tendré que aguantar más esto. Pero necesitaba estar allí para mi hijo. Si fuera una niña, él también podría haber huido con ella”.
Su padre le dijo que cuando naciera el bebé, lo mataría. Cuando ingresó al hospital, el día antes de dar a luz, las enfermeras le dijeron a Shannon que tenía más de 39 semanas de embarazo. Shannon mantuvo a su hijo durante un año, pero lo dejó en adopción a la edad de uno “porque necesitaba una vida mejor”.