El ser humano es por naturaleza inconforme. Es raro ver a alguna persona satisfecha cien por ciento con su físico. Por tal razón, la mayoría recurre a cirugías estéticas.
Esto pasa mayormente en el caso de las mujeres. A algunas no les gusta su nariz poco perfilada, otras creen que sus senos son muy pequeños, otras que sus nalgas deberían ser más grandes y pare usted de contar.
Pero también existen casos contrarios. Hay mujeres que consideran que Dios les dio mucho volumen. Tal es el caso de la modelo australiana Simone Holtznagel, que está un poco acomplejada con sus enormes senos.
Sí, aunque usted no lo crea, ella se ha quejado de sus pechos grandes porque son “un peligro”. Y es que asegura que le duele el cuello, la espalda, entre otras cosas.
Con información de Nalgas y Libros