Comunidades de Lara en ALERTA por falta de agua durante cuarentena por coronavirus

FOTO: La Prensa Lara

 

 

Una de las principales acciones que invita a hacer la Organización Mundial de la Salud para prevenir el coronavirus es lavarse las manos con abundante agua, pero cumplir ese simple procedimiento en Lara se hace dificilísimo porque en muchos sectores de la región el vital líquido por tubería escasea.





Las primeras huellas que ha dejado la pandemia en Venezuela ha encendido las alarmas de muchos larenses, hasta el punto que han expresado cierto desespero por no tener agua. En pozos, tuberías de plazas, riachuelos, botes en calles, estaciones de bombeo, en las estaciones de bomberos y hasta pidiendo en los llenaderos de cisternas han acudido los guaros con tal de tener agua en sus viviendas, poder lavarse las manos y tener aseada, aunque sea un poco, sus residencias.

La señora Solima de Márquez cuida a su papá de 92 años que está enfermo en Cabudare, municipio Palavecino. Desde el viernes no le llega agua por tubería y si no fuera por el tanque de 2 mil litros que tiene en su casa, que lo llenó gracias a una cisterna que pagó, la exposición al coronavirus fuera más de lo normal.

Aquí la familia tuvo que reunir dinero para poder costear el camión del agua y llenar el tanque. Mi papá por ser anciano es demasiado vulnerable a ese virus, y si no se lava las manos, se baña o no aseamos la casa, él, que está delicado de salud se puede contagiar. Aquí el agua tiene 10 días que no llega por tubería, entonces mantenerse limpios es imposible porque el bolsillo no aguanta comprar tantas cisternas“, detalló la señora.

La solución del camión cisterna no la pueden costear habitantes de zonas donde ni la red de tubería está instalada, pues desde el decreto de emergencia sanitaria, los precios cambiaron, ya que los camioneros ajustaron las tarifas. Por un tanque de 900 y 2000 litros usted puede pagar desde 250 mil hasta 600 mil bolívares, respectivamente.

Cómo vamos a evitar que los niños o los abuelos no se enfermen si no tenemos agua ni para lavarnos las manos, menos para asearnos o limpiar nuestras casas“, comentó Aleida Montesino, quien vive en Sanare, municipio Andrés Eloy Blanco, quien se la pasa cazando agua en otras comunidades o tuberías en espacios públicos para poder llenar pipas y tobos.

La escena de gente cargando envases con agua en coches, carretillas o tanques en camionetas y camiones es habitual sobre todo en Iribarren. Zonas como el oeste y el norte del municipio viven un calvario desde hace mucho y no tienen esperanza luego de que bajaran críticamente los niveles del embalse Dos Cerritos, lugar donde se distribuye el 75% del vital liquido en la región. Los habitantes aseguran no recibir ayuda por parte de la Gobernación de Lara ni la alcaldía.

Así lo reseñó Daimar Díaz // LA PRENSA de Lara