Wuhan recupera la alegría pero no baja la guardia

Wuhan recupera la alegría pero no baja la guardia

Una pareja con máscaras faciales posa para una foto después de una sesión de fotos al lado del Lago del Este en Wuhan, en la provincia central de Hubei de China el 19 de abril de 2020. – La pareja había planeado su matrimonio para agosto de este año, pero pospusieron la celebración de su matrimonio debido a COVID-19 de acuerdo con la información dada por la novia. La economía de China se contrajo por primera vez en décadas el último trimestre cuando el coronavirus paralizó al país, en un golpe histórico a la promesa del Partido Comunista de continuar la prosperidad a cambio de un poder político incuestionable. (Foto por Héctor RETAMAL / AFP)

 

Fotos de boda, baños en el lago, pícnics: la vida vuelve despacio a Wuhan, la ciudad china donde surgió la epidemia de covid-19, aunque habrá que esperar para recuperar completamente la normalidad.

Tras 76 días aislada del mundo, esta metrópolis de 11 millones de habitantes del centro del país levantó su bloqueo el 8 de abril. Y poco a poco, sus habitantes empiezan a asomar la cabeza al exterior.





Al borde del lago del Este, una joven vestida de novia posa con una gran sonrisa junto a su futuro marido ante el objetivo de un fotógrafo. Para esta ocasión, la novia retira por unos instantes su mascarilla de protección.

En un parque cercano, un abuelo acuna a su nieto tumbado en una hamaca. Al lado, varias familias con tiendas y manteles de pícnic disfrutan del sol.

Al borde de un puente que atraviesa el río Yangtsé, un joven canta y baila al ritmo de la música, al que enseguida se le unen algunos transeúntes.

Más abajo, valientes nadadores se adentran en el río más largo de Asia, pese a la fría temperatura.

Unas escenas que rompen con el ambiente fantasmal que reinaba en la ciudad cuando se instauró la cuarentena a finales de enero, así como con las imágenes de los lugares públicos desiertos en todo el mundo debido a la pandemia de covid-19.

Incluso los atascos han vuelto a aparecer en Wuhan en algunas arterias.

“Aún llevará un tiempo, pero vamos en la buena dirección”, explica a la AFP Bai Xue, una habitante de 24 años.

Esta foto tomada el 18 de abril de 2020 muestra a los fanáticos del equipo de fútbol Wuhan Zall dando la bienvenida a los miembros del equipo a su casa en la estación de ferrocarril de Wuhan, en la provincia central china de Hubei. – Wuhan Zall, el equipo chino de la Súper Liga del epicentro de la pandemia de coronavirus, hizo un regreso emocional a la ciudad después de más de tres meses separados de sus familias. (Foto por STR / AFP) / China OUT

 

En cambio Wuhan no baja totalmente la guardia.

Aunque el número de nuevos casos de covid-19 cayó a cero en la ciudad desde hace varias semanas, la población ve con preocupación a las personas asintomáticas y a aquellas que vienen del extranjero.

Los usuarios de metro por su parte deben escanear con su teléfono móvil un código QR para que puedan ser localizados en caso de que entren en contacto con un enfermo. Las residencias continúan verificando las entradas y las salidas. Y las barreras de plástico aún bloquean el acceso a algunas calles.

Otra preocupación es la actividad económica.

Vendedores de mercado, propietarios de cafés… Muchos afirman a la AFP que el cierre de Wuhan hundió las ventas y disparó los precios de los alquileres.

El ayuntamiento intenta invertir la tendencia y ha distribuido vales de compra por valor de 70 millones de dólares (uno 65 millones de euros), que los ciudadanos pueden usar en los supermercados, los grandes almacenes o los restaurantes.

Pero la mayoría de los comercios de alimentación siguen cerrados. Y los que están abiertos solo pueden vender para llevar.

“Tenemos muy pocos clientes”, suspira Han, una mujer de 27 años propietaria de un pequeño puesto de leche de soja. “La gente tiene miedo de los casos asintomáticos”, precisa.

AFP