Nicolás Maduro, durante sus declaraciones desde el Palacio de Miraflores, intentó vincular el inevitable aumento de la cesta básica, ante la debacle del bolivar en plena pandemia, con la “Operación Gedeón” que el régimen chavista relaciona con supuestos planes de derrocamiento.
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“La guerra de precios brutal de esta oligarquía coincidió unos días antes con la operación terrorista”, comentó Maduro ante las cámaras de la televisora estatal.
“Sabía que esto buscaba crear el descontento”, agregó Maduro, quien estima que tal operación buscaba el apoyo popular para lograr el éxito.
“Es contigo, tú lo sabías”, fustigó Maduro, en su paranoia, a un interlocutor invisible, que se presume se trataría del presidente encargado Juan Guaidó.
“¿De dónde viene ese plan? Del norte”, aseguró Maduro en otro arranque de paranoia.
Además de culpar al sector privado del país de aumentar los precios de los alimentos por capricho y no a causa de la devaluación inclemente del bolívar, Maduro y Tareck El Aissami aseguraron que hay sectores “no esenciales” que deben permanecer paralizados debido a que constituyen actividades económicas “superfluas”.
“Hay sectores que no son necesarios en esta coyuntura”, mencionó El Aissami. “Esos sectores tienen para garantizar el empleo”, afirmó el vocero chavista señalado por la Justicia de Estados Unidos.
Por su parte, Maduro dijo que su régimen los apoya “con financiamiento blando y pagándoles la nómina” gracias al “sistema patria y los bonos”.