Migrantes venezolanos sufren más riesgo de violencia y explotación por la pandemia

Foto: Raul ARBOLEDA / AFP, 10/02/2019, Norte de Santander (Colombia).

 

La directora del programa del Comité Internacional de Rescate (CIR) para Colombia y Venezuela, Marianne Menjivar, afirmó este jueves que los migrantes venezolanos tienen mayor riesgo de sufrir “violencia y explotación” tras el cierre de fronteras por la emergencia de la COVID-19.

La funcionaria señaló también que las cifras publicadas hoy por la Agencia de las Naciones Unidas para los Refugiados (ACNUR), con un récord de 79,5 millones de desplazados y refugiados en el mundo, no recogen la situación de mayor riesgo para los venezolanos migrantes provocada por el coronavirus.





“Las cifras no tienen en cuenta la emergencia y las vulnerabilidades por COVID-19 (…) el cierre de las fronteras amenaza con aumentar el riesgo de violencia y explotación de grupos criminales y traficantes de personas”, afirmó Menjivar en un comunicado.

ACNUR informó que los desplazados y refugiados en el mundo crecieron en casi nueve millones de personas el pasado año hasta alcanzar el récord de 79,5 millones, aproximadamente el 1 % de la población mundial.

Según ACNUR, Venezuela es el segundo país en número de refugiados, cuyo éxodo es de más de 5 millones de personas y supera así a naciones como Afganistán (2,7 millones) Sudán del Sur (2,2 millones) y Birmania (1,1 millones), quedando por debajo de Siria, con 6,6 millones de refugiados.

CIERRE DE FRONTERAS

Menjivar insistió en que el “hecho de que los venezolanos sean el número dos en esta lista a nivel mundial debería ser un gran motivo de preocupación, y estas son las cifras del año pasado”.

El organismo calcula que “5,1 millones de venezolanos están actualmente desplazados, mientras que 7 millones dentro de Venezuela necesitan asistencia humanitaria”.

Colombia es el país que alberga a más migrantes venezolanos, unos 1,8 millones en los últimos cinco años que huyeron de la crisis en su país.

Sin embargo, para contener la propagación del coronavirus en el territorio, Colombia cerró las fronteras con Venezuela el pasado 14 de marzo.

Pero el cierre no detuvo los movimientos transfronterizos sino que “ha empujado a un gran número de venezolanos a viajar a través de cruces informales donde existen mayores riesgos de peligro físico y explotación” explicó Menjivar.

Además, el cierre de fronteras ha impedido “que muchos venezolanos satisfagan necesidades básicas o busquen asilo”.

Se esperaba que dos millones de venezolanos se mudaran entre Venezuela y Colombia este año, “confiando en una frontera abierta para el acceso diario a alimentos, medicinas y otros bienes y servicios básicos en Colombia”.

SITUACIÓN CRÍTICA EN VENEZUELA

Según las autoridades migratorias de Colombia entre el 14 de marzo y el 28 de mayo de este año han retornado a su país 71.052 venezolanos de manera voluntaria presionados por la pandemia.

Los venezolanos, que salen de distintos lugares de Colombia, llegan en autobuses fletados o incluso caminando a Cúcuta o Arauca, capitales de los departamentos de Norte de Santander y Arauca, respectivamente, con la esperanza de cruzar la frontera hacia su país, un recorrido inverso al que hicieron en los últimos años.

Al llegar a Venezuela se encuentran con que “casi el 90 % de los hospitales tienen una escasez crítica de suministros y más de la mitad de los médicos de Venezuela han abandonado el país, que solo tiene ocho camas de hospital por cada 10.000 personas y solo 84 camas de UCI para una población de 32 millones” según explicó la directora del CIR.

Además, “sólo el 18 % de las personas siempre tiene acceso a agua limpia” añadió Menjivar.

AYUDA HUMANITARIA

Para paliar la situación, el CIR aporta kits de higiene, alimentos y servicios de protección a los venezolanos e implementos para atender parto.

Además, ha establecido un centro de atención telefónica administrado por profesionales de la medicina y la enfermería.

También proporciona medicamentos gratuitos, atención médica sexual y reproductiva y dinero en efectivo para mantener a los venezolanos alimentados y en alojamientos seguros, al igual que brinda asistencia médica a los caminantes y retornados venezolanos en la frontera.

Colombia alberga “no solo al mayor número de refugiados venezolanos de la región sino también el mayor número de desplazados internos en el mundo” como son los del conflicto armado interno.

EFE