El lugar exacto donde Vincent Van Gogh pintó su obra maestra final, Tres raíces, horas antes de dispararse fue descubierto en un pueblo francés, con la ayuda de una postal.
Por infobae.com
Wouter van der Veen, director científico del Instituto Van Gogh, asegura que la obra fue realizada durante el ultimo día de Van Gogh en el pueblo francés de Auvers-sur-Oise, cerca de París.
En ese sentido, Van der Veen explicó que todo comenzó cuando observó una postal cuando estaba revisando algunos documentos durante el cierre de la habitación-museo en la posada Auberge Ravoux, debido a la pandemia de coronavirus.
En este cuarto, el artista holandés pasó sus últimos 70 días y su cuidado está a cargo del instituto que van der Veen preside. “Mi ojo fue atrapado por un detalle de la postal”, dijo, para luego notar que los troncos y raíces representados por el pintor se encontraban cerca del hospedaje.
Sostuvo que la postal de la aldea, de principios del siglo XX, muestra un terraplén con los árboles en la carretera principal a través de la aldea, a 18 millas al norte de París. Luego, lo comparó con la pintura y descubrió que “los troncos y las raíces correspondían”.
Aunque el paisaje que aparece en la postal es de un par de décadas después del lienzo, se puede ver con claridad que ambas representan la misma configuración de una colina, que simboliza la vida y la muerte de Van Gogh, según Louis van Tilborgh, veterano investigador del Museo Van Gogh de la capital holandesa.
“Descubrir el lugar donde Van Gogh pintó su último y más misterioso trabajo es un sueño hecho realidad, que todavía estoy tratando de comprender ‘‘, agregó van der Veen.
Investigadores del Instituto Van Gogh, junto con Bert Maes, un dendrólogo especializado en vegetación histórica, procedieron a comparar la pintura, la postal y la ladera actual y concluyeron que era “altamente plausible” que las raíces de la pintura de Van Gogh hubieran sido descubiertas.
El tronco del árbol principal en el centro de la pintura ha sobrevivido los 130 años desde la muerte del pintor holandés, y con la ayuda de la postal, los investigadores pudieron cerrar la brecha entre hoy y la famosa pintura de 1890.
El descubrimiento hecha nueva luz sobre los momentos finales del genio, quien había estado trabajando en la pintura en un caluroso día de julio de 1890 cuando regresó tambaleándose a la posada del pueblo con una herida de bala en el pecho. Aunque las razones que produjeron la herida siguen abiertas a especulación.
La teoría sobre que el artista habría sido asesinado fue presentada por primera vez en una biografía del pintor realizada por Steven Naifeh y Gregory White Smith hace nueve años, y apareció en la película de 2018 En las puertas de la eternidad, protagonizada por Willem Dafoe. Su director, el pintor estadounidense Julian Schnabel, dijo a la agencia de noticias AFP cuando se estrenó la película que Van Gogh probablemente fue asesinado y que “era poco probable que un hombre que había pintado 75 lienzos en casi tantos días en Auvers-sur-Oise fuera suicida”.
Pero Van der Veen desestimó “estas pésimas teorías” e insistió en que para él la pintura era el “testamento final de Van Gogh, una carta de despedida … El suicidio había sido una opción para él durante un año”. Y agregó: “El matorral de raíces era un símbolo de las luchas de la vida. Cortamos el árbol y de sus tocones aparecen nuevos brotes. Tiene sentido, el tema de la vida y la muerte, y elimina todas estas pésimas teorías que hacen poco por su memoria”.
El revólver con el que se cree que Van Gogh se disparó se vendió por 162.500 euros (147.000 libras) en una subasta en París el año pasado.