El jueves pasado, el último punto de la discusión de la Asamblea Nacional fue el relativo a la paralización absoluta de la educación venezolana. La discusión produjo un acuerdo que ha pasado injustamente desapercibido incluso para los educadores venezolanos. Tal vez por que ese día la relevancia mayor la obtuvo el tema más fundamental en nuestro país en estos momentos: la monstruosa
crueldad del régimen recogida en el informe más reciente de la ONU.
Los diputados acogieron el acuerdo presentado por la subcomisión de educación, presidida por Bolivia Suárez. Un texto que condensa la angustia de los educadores venezolanos en todos sus niveles. Se emite ” en el marco del inicio del nuevo año escolar y la paralización de la educación como consecuencia de la destrucción del sistema educativo por parte del régimen de Nicolás Maduro”.
Consideraron los diputados para el acuerdo: la educación como un derecho fundamental, la estrategia destructiva del régimen para con el sistema educativo, las violaciones y liquidación de la autonomía universitaria, el problema económico nacional generado por el régimen, así como su incompetencia para el manejo de la problemática suscitada por el coravid-19; la pérdida del año y del primer semestre universitario para la mayoría de los estudiantes, la necesidad de la AN de acompañar las justas demandas del sector educativo, y el hecho de que no existen condiciones mínimas indispensables para el inicio del año escolar en ninguna modalidad.
En tal sentido, acordaron:
Tomar en cuenta las declaraciones del secretario general de la ONU acerca de la catástrofe que representaría para niños y jóvenes el cierre prolongado de las escuelas y otros centros educativos. También: establecer condiciones mínimas de seguridad social, salarios de los docentes y otros partícipes en el hecho educativo, reactivación de las pólizas de HCM con adecuación a la realidad, garantías para la salud, dotación de insumos y de acceso a internet, acondicionamiento de las plantas físicas, garantía de transporte. Del mismo modo acordaron la creación de una comisión de alto nivel para la elaboración de un plan de rescate de la educación.
Celebro la sintonía de la Asamblea Nacional con los profesores y maestros en lucha por la dignidad y la protección de la educación venezolana. Ratifican que, con este régimen usurpador y criminal, la educación ha llegado a la destrucción absoluta y no tiene escapatoria. Se precisa una inmediata transformación de la misma y de la orientación política del país, para darle un sendero positivo a estas ingentes necesidades.