Todo comienza con la inspiración que abraza hasta el último trazo. Sus manos delinean sentimientos que dan voz a una identidad. Los colores y texturas se deslizan por la historia de su país. Ha cosechado la admiración del público. Su vida es una colección de arte, con distintos escenarios, pero siempre con una sola protagonista: Venezuela.
Hay algo esencial en Oscar Olivares y es la esperanza. Basta con ver sus dibujos para confirmar que no es el típico artista visual de las últimas generaciones. Esa autenticidad lo ha impulsado a lograr grandes hazañas. Ha expuesto su trabajo en importantes galerías del mundo. Fue el exponente más joven en la prestigiosa Art Expo de Nueva York. Laureado con diversos reconocimientos nacionales e internacionales como el Premio Iberoamericano de Emprendimiento Online 2015 y el Premio Mara de Oro 2017. Por si fuera poco, creó su propia academia. Pero, ¿qué hay más allá de este ilustrador?
Por Elizabeth Gutiérrez/ La Patilla
Su pasión inició desde que era un niño. Pintar era su mayor felicidad. A la edad de 14 años, Oscar Manuel Olivares Matos comenzó a ilustrar el futbol venezolano y desde entonces, su ingenio no ha dado tregua. “Mis dibujos tenían muchos errores, pero expresaban una pasión por el fútbol nacional que nunca se había visto en caricaturas. Al ver que podía expresar las emociones de otras personas y entender cuan identificados se podían sentir con mi obra, comprendí que era mi misión de vida”, confesó.
Durante mucho tiempo, a Olivares se le reconoció como “El pintor de las protestas”. Una de sus obras más emblemáticas, según afirma, es “Héroes de la Libertad”, representada por más de 60 jóvenes que perdieron la vida durante las violentas manifestaciones de 2017. La pintura impactó de tal forma que se hizo viral en aquel entonces. Sin embargo, no era lo que esperaba. Los años pasaron y con ellos, descubrió que debía cambiar su rumbo.
“Llegó un momento en el que los titulares hablaban de entrevistas a ‘El pintor de las protestas’ y no a Oscar Olivares, lo cual iba a un encasillamiento que no quería. Luego del 2017, empecé a dibujar temas totalmente diferentes. A algunas personas les costó entenderlo”, resaltó.
Amarillo, azul y rojo, eran los tonos que identificaban sus bocetos. Posteriormente, el ícono de la arepa se convirtió en un sello imborrable de sus obras. “Los colores de la bandera fueron una tendencia el 2014, de hecho, la serie dedicada al tricolor fue ganadora de uno de los Premios Iberoamericanos de Emprendimiento Online 2015”, señaló.
En relación a lo anteriormente expuesto, agregó: “La arepa sí es un elemento que permanece en mis dibujos. En primer lugar, el sol es una arepa en el universo de mi obra. Esto ilustra que la luz que añoramos, la esperanza y el desarrollo están en cosas que, como la arepa, hacemos con nuestras manos”, expresó.
Su esfuerzo y dedicación fueron recompensados. Talleres de dibujo de cómics en Caracas, Malasia y Madrid, lo indujeron a fundar la Academia Olivares, una magistral escuela de dibujo online donde participan estudiantes de distintas partes del mundo para formarse como artistas. “Decidimos crear la Academia para transformar el arte en Venezuela desde las bases, con una generación de artistas capaces de vivir de su talento y provocar oportunidades”, manifestó.
El año pasado, el venezolano y conferencista emprendió un proyecto para cumplir el sueño de miles de aspirantes a través de las becas otorgadas por la Academia Olivares. Este 2020 continuó con la iniciativa. “Entregamos 100 becas. Tuvimos más de 1.200 postulaciones. Creo que esto resume el crecimiento que hemos logrado y las ganas que hay por desarrollar talentos en Venezuela. 50 becas incluyen el Programa Completo de un año en la Academia y 50 son para cursos cortos. Esperamos continuar con este programa todos los años”, comentó.
Oscar Olivares es tan libre como sus diseños. A sus 24 años, es uno de los nombres más prometedores del arte nacional. Ha trazado cada línea de su carrera con mucho ímpetu, de donde se desprende gran parte de su éxito. Los colores son el medio para expresar felicidad. El dibujo, su conexión con el alma y la mejor forma de transmitir un mensaje. “Cada obra tiene una inspiración única e irrepetible, pero siempre busco elevar el espíritu humano, que cada persona luego de ver una obra pueda sentirse más motivado y conectado con su ser superior. En mis trabajos nunca verás tristeza, apatía ni desesperanza. Aunque pueda llegar a sentirlas, al pintar es como si me librara de todos estos sentimientos”, confirmó.
Como todo buen artista, Olivares se mantiene creando. Desarrolla nuevos proyectos creativos en los que destaca su primer curso sobre pintura digital que podría estrenarse a principios de 2021. “Estoy trabajando en varias ideas personalizadas para clientes privados. También, en nuevas obras que llevarán mi arte a otros mundos. Ya no es solo nuestra querida Venezuela, sino que empezaremos a explorar otros planetas, galaxias y dimensiones. Serán muy diferentes a lo que he mostrado hasta ahora”, afirmó.
¿Qué ilustración representa a Venezuela hoy en día?
“La obra que representa mejor a Venezuela actualmente es el mural con tapas de botellas que hicimos en El Hatillo con la ONG Okospiri y Proyectos Maf. Este era un muro de 45 metros que estaba abandonado, gris y ubicado en una plaza llamada popularmente ‘La plaza de los borrachos’. Se pintó todo de blanco. En equipo hicimos el dibujo. El mural solo era posible si teníamos suficientes tapas (…) Al final, recibimos más de 250.000 y la obra ha sido reseñada en todo el mundo, desde USA, hasta Europa y Asia. Venezuela es ese muro. La buena noticia es que todos vamos a transformarlo en una gran obra de arte”, finalizó.
