Antero Alvarado, socio principal de Gas Energy Latín América, indicó que una familia venezolana consume una bombona de 10 kilos de gas en tan sólo dos semanas, cocinando tres veces al día, detalló Fedecámaras.
El gas propano tenía antes dos fuentes de suministros: el Lago de Maracaibo en el cual se extraía el metano y el propano y, desde el 2018 ya no se extraen del occidente del país.
Prácticamente, se está dependiendo de la planta de fraccionamiento de José que es alimentada por tres plantas de extracción en Oriente: San Joaquín, Santa Bárbara y Jusepín.
“Prácticamente, tenemos un problema estructural. La caída de producción y los altos volúmenes de quema y venteo de gas en la zona de Monagas esté saliendo a la superficie y venga con menos contenido de riqueza de gas”.
El consumo de gasolina ha caído muchísimo
Se debe reconocer, que a consecuencia de la pandemia por la COVID-19, el uso de los vehículos particulares y privados en el país, ha obligado a la población venezolana a no hacer uso frecuente de ellos; y también motivado a la escasez y regulación de la gasolina.
Antero indicó que existen tres factores «favorables» con respecto a la situación de la gasolina en el país:
- La gasolina se puede traer importada y es lo que ha sucedido por los buques iraníes que han llegado al país con barriles de combustible.
- Se cuenta con refinerías en el país que pueden estar operativas y aumentarse la producción de las mismas.
- Las personas no pueden usar un combustible distinto para aplicar gasolina a sus carros, es decir no existe alternativas para este producto.
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