Documentan por primera vez la biofluorescencia en demonios de Tasmania

Documentan por primera vez la biofluorescencia en demonios de Tasmania

Un demonio de Tasmania en el zoológico de Toledo (Ohio, EE.UU.) facebook.com/TheToledoZoo

 

Los trabajadores del zoológico de Toledo (Ohio, EE.UU.) han documentado por primera vez la biofluorescencia en demonios de Tasmania, según se aprecia en una fotografía publicada el pasado sábado en su página oficial de Facebook.

Por actualidad.rt.com





En la imagen se puede ver cómo las orejas, los ojos, parte de la nariz y los colmillos del animal brillan de forma azulada en la oscuridad debido a dicho fenómeno, que consiste en que un organismo vivo absorbe la luz y la reemite con un color diferente.

“La piel alrededor de su hocico, ojos y oído interno absorbe la luz ultravioleta (un tipo de luz y que es naturalmente abundante, pero invisible al ojo humano) y la reemite como luz azul visible”, explica el zoológico. “No está claro si tiene algún propósito ecológico o es simplemente una casualidad”, añade.

La institución señala que debido a los hábitos principalmente nocturnos de esta especie, es posible que no encuentre niveles de ultravioleta que induzcan su fluorescencia en la naturaleza, detallando que tanto el demonio de Tasmania como otras especies con las que interactúa —inclusive depredadores y presas— pueden no ser capaces de detectar dicha luz ultravioleta o la fluorescencia resultante.

“Adaptación funcional”

“Incluso si la biofluorescencia ocurre de manera natural y es detectable por una especie, también necesitaría influir en su comportamiento para que se considerara una adaptación funcional”, continúa el comunicado, que subraya que hay que ser cautos a la hora de interpretar estos hallazgos.

Por otro lado, el zoo de Toledo destaca que recientemente se ha descubierto que este peculiar fenómeno se da también en otros mamíferos australianos como el ornitorrinco, el uómbat, la zarigüeya de Virginia y la ardilla voladora del Sur.

“Si bien las razones (o la falta de ellas) de la biofluorescencia en los mamíferos aún no se han determinado, es interesante especular” con el tema, afirma la institución. “La evidencia sugiere que algunas especies de aves usan la fluorescencia ultravioleta para atraer parejas, [mientras que] muchos peces incluso la utilizan para camuflarse”, concluye.