Abraham Sequeda: Desagravio a los venezolanos

Abraham Sequeda: Desagravio a los venezolanos

Los acontecimientos que aún están en marcha en Venezuela han ofendido directamente al ser humano de este país. La maldad, la ineptitud, el desprecio a sus semejantes, hacia la legalidad y muy fundamentalmente hacia la vida de las personas, está cruelmente ejerciéndose y no podemos ser incautos o también indiferentes.

Es propicio aceptar que antes y ahora, durante los acontecimientos de estos días se intenta imponer el camino del mal, de la trampa, de la humillación hacia una población a la “que más le puede pasar que no le haya pasado”, parafraseando la letra de una gaita común de esta época.

Muchos somos responsables por no haber hecho lo suficiente para evitar tanta destrucción de la ética y del Estado de Derecho, de la soberanía de un país y de la soberanía individual, de los deseos y decisiones, sueños de cada uno de los venezolanos. Aunque los mecanismos estén ahí, el desdén por las iniciativas y acciones individuales como subsidiarias del trabajo en equipo, es evidente.





En su forma y fondo, el fraude electoral del 6 de diciembre, representa el acto por excelencia de la tiranía, pero muy venido a menos y totalmente degenerado. La soberanía tanto la que se refiere a las decisiones del ciudadano como ser libre, único e independiente en su creación y responsable en su acción, así como también, la soberanía para tomar decisiones en el plano político dentro de un contrato social, ambas han sido vulneradas por el estado criminal y los que fueron llamados en algún momento partidos políticos de oposición, ahora se transformaron en apéndice del primero.

Las actividades previas al 6D llevadas a cabo por el conglomerado criminal, durante ese día y posiblemente para materializar una asamblea nacional que no es tal, deben ser condenadas y desechadas. Su acto mismo y resultados, no significan nada ni cualitativamente ni cuantitativamente. Pero sí queremos ver algo más, la derrota, debilidad y cerco de los tiranos está a la vista y sus posibilidades de maniobra totalmente restringidas.

El insulto a una población honesta es inaceptable. Nuestro rol es asegurarles a los venezolanos las libertades individuales con responsabilidad y el retorno de su soberanía.