Los artistas nacionales han logrado impulsar su música, con el factor pandemia pisándoles los talones incluso, bajo un género poco apreciado en Venezuela como lo es el Rock.
lapatilla.com | Katerín García
En Venezuela anualmente se realizaban más de 200 conciertos de rock en varios de sus subgéneros inundando las tablas que retumbaban con decibeles musicales y cantos rebeldes – algunos guturales -, que hoy en día llegaron a las plataformas streaming, tras la llegada del coronavirus al mundo.
Podríamos pensar que tras los incontables ciclos de cuarentena vividos en el país, la movida rockera se paralizó. Sin embargo, existe una gran cantidad de agrupaciones que lograron posicionar su música mediante las redes sociales, tales como Sieth, Delito, Gran Celaje, Sofía Insomnia, Los Delorean, Sick Feel, Natastor, Grand bite, Coversfromhell y Mean Machine.
En este sentido, varios artistas de estas bandas fueron reunidos con el objetivo de develar la actual realidad sobre este campo eufónico donde un punto fue unísono, fue un año para crear las estrategias y reinventarse.
2019: El Trampolín
Este año representó un impulso para todas las bandas rockeras de Venezuela, por lo que quisimos ondear sobre la perspectiva que tenían estos talentos a principios del 2020.
“Pintaba bien el 2020, teníamos varias fechas para presentaciones que se cayeron. Así que en un principio tenía buena cara”, señaló Huascar Rodríguez, vocalista de la agrupación Delito.
De igual forma, Robert Pacheco de Los Delorean, coincidió en que “a principios de año estábamos súper activos, veníamos con varias fechas en la capital y otras ciudades del país, pero todo se paralizó”, dijo.
Por su parte, Sick Feel recordó que para ese momento “teníamos muchas expectativas, incluso una gira por Latinoamérica, por esta situación tuvimos que cambiar todo”.
Según la banda Sofía Insomnia, “la pandemia como tragedia hizo que la movida rockera tomara consciencia de sí misma y pusiera a prueba su creatividad para trascender sus propios nichos, sus zonas de confort y resignificarse”.
Los integrantes de estas agrupaciones rockeras afirman que la movida en cierto modo se vio afectada, pero para bien, aunque no se crea. Todo sirvió para reinventarse, el lado positivo de lo que ha dejado el fenómeno del coronavirus, no solo en Venezuela, sino a nivel mundial.
¿Un golpe o un nuevo espacio a la movida?
La pandemia definitivamente golpeó a todos los sectores internacionales que puedan existir, sin embargo también abrió las puertas al mundo para dar a conocer esos talentos dignos de exportar.
Se afianza que esta contingencia ha sido un espacio para la movida del rock desde Venezuela y además dio luz verde para que a creatividad volara: “Este tiempo nos cae como anillo al dedo, por ejemplo Sieth está en la etapa final de la grabación de nuestro más reciente material, State of mind y estamos con lupa de relojero, detalle tras detalle, para que este sea un buen material”, nos comentó Hernain García bajista de Sieth.
Por su parte, Huascar Rodríguez, vocalista de Delito explicó que “las ventajas de esta situación fueron las distintas iniciativas que salieron en la pandemia, como producción de fanzines y compilados. También nos dio tiempo para sacar mercancía de la banda, la cual nos ayudó a volver a los ensayos para el cierre de año”.
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Vale acotar que, estos grupos han logrado escalar a estratos y colaboraciones internacionales tras las diferentes relaciones obtenidas en pandemia. Muchas ventanas se abrieron.
El sentir de un artista encerrado
Todos vivimos un encierro absoluto este 2020 y aunque fue un tiempo para crear, siempre existe la añoranza de volver a una vida “normal”, pero la reinvención llegó para quedarse.
Robert de Los Delorean admitió que “la pandemia afectó muchísimo, creo que más que todo emocionalmente, no poder hacer shows, reunirte, planificar o ensayar es terrible, y más sin saber que pasará y hasta cuándo será”.
“A todos nos ha afectado, sin importar el género o estilo de música que hagamos (…) todo este tema de la cuarentena los espacios de los encuentros se hayan cerrado afecta, claro, pero le ha dado cabida a muchas bandas, nos hemos reinventado, en Venezuela se ha visto una representación bastante talentosa, son muchas las ventajas” agregó Joel, vocalista de Sick Feel.
Internacionalización
Tal como lo mencionamos anteriormente, las redes sociales jugaron un rol importante para impulsar y dar a conocer a muchos artistas que en tiempos normales no lo habían logrado… Asimismo, funcionó para las bandas de rock nacionales por medio de eventos viralizados por plataformas digitales logrando la obtención de alianzas y firmas al rededor del mundo.
“Con la llegada de la pandemia y el aislamiento general, todo tuvo que replantearse creando nuevas alternativas culturales a través de las redes sociales, lo que derivó en un amplio catálogo de opciones en formato live streaming, en el que cada artista a su manera creó su propio espacio para relacionarse con ese vasto afuera que ofrece el mundo digital”, explicó la banda Sofía Insomnia.
Por su parte, el baterista Juan Carlos Figueroa resalto que “los músicos y productores se están dando cuenta del potencial musical que hay, con lo que queda en el metal venezolano, debido a la diáspora, se está viendo un crecimiento en la difusión de las bandas, y creo que el año que viene continuará así”.
“Debemos hacer música para el mundo”, es la conceptualización que da la banda Gran Celaje viendo la movida de forma globalizada.
Este, siendo un punto clave, definitivamente evidencia que el crecimiento del público orgánico para cada banda en su género ha obtenido un auge significativo y apreciativo.
Una voz unánime ¡Clara y directa!
Todas estas bandas que esclarecieron el escenario rockero en Venezuela elevan una petición “apoyen la movida y el talento nacional”, recalcando que gracias a la fanaticada cada grupo sigue creciendo para así dar más y más.
Larga vida al ROCK