San Francisco de Sales, “el patrón de los periodistas”

Hoy, 24 de enero, se celebra en la congregación “Salesiana” a San Francisco de Sales, patrón de los periodistas y escritores católicos. Durante su vida destacó por su gran capacidad comunicativa a través de la escritura. Este santo fue obispo de Ginebra y recibió su reconocimiento patronal de manos del Papa Pío XI en 1923.

Estudió Filosofía y Teología en los jesuitas de Clermont, Francia y con 24 años se doctoró en Derecho por la Universidad de Padua, Italia. Como párroco de Chablais catequizó a miles de personas. En este sentido, sus grandes habilidades comunicativas le llevaron a ser nombrado predicador en los púlpitos de París entre 1618 y 1619.





San Francisco de Sales desarrolló una gran actividad literaria que comenzó con su misión evangelizadora en Chablais, donde redactó folletos que se distribuían entre la población a modo de pasquines diarios. Fue un hombre santo capaz de cambiar la opinión pública con la palabra, un maestro de la comunicación, que dedicó su vida a los pobres y a la literatura. Tuvo una gran pasión por las letras, tanto que cuando estaba intentando convertir a los protestantes, al ver que estos no se dejaban, preparó unos escritos que por la noche dejaba en las puertas de sus casas.

Desde su ordenación como obispo de Ginebra se dedicó a escribir textos literarios. Fue autor de numerosos libros como Controversias, Tratado del amor de Dios, Conferencias espirituales o Defensa del estandarte de la Cruz, destacó sobre todos ellos el titulado Introducción a la vida devota, el más popular del siglo XVII. Otras de sus obras fueron Sermones y Cartas.

San Francisco fue beatificado por el Papa Alejandro VII en el 1661 y lo canonizó en el 1665, a los 43 años de su muerte. En 1877 recibió el título de Doctor de la Iglesia por su trayectoria literaria y personal.

El 26 de enero de 1923, Pío XI lo designó Santo Patrón de los periodistas y los escritores en una encíclica titulada ‘Rerum Omniun’. Este pontífice recogió en un escrito que es necesario que los periodistas “imiten y muestren en todo momento que el rigor siempre ha estado unido a la moderación y la caridad, que era la característica especial de San Francisco”.

De Sales falleció de un derrame cerebral y sus atributos son la pluma, el libro, el corazón en llamas o perforado, el crucifijo y rodeado de ángeles; con frecuencia aparece con buena amiga Santa Juana de Chantal. Es patrón de los periodistas católicos, escritores y prensa católica en general.

Antes de su muerte, elevó una plegaria por las empresas periodísticas “para que dejen guiarse por el amor a la verdad y por el servicio a los intereses comunes de toda la sociedad, más que a los intereses particulares de las empresas”.