Imágenes difundidas en redes sociales evidenciaron la presencia de los helicópteros Mi-35M2 “Caribe”, de fabricación rusa, durante el conflicto que sostienen las Fuerzas Armadas venezolanas con fuerzas de la guerrilla colombiana en el estado Apure.
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Luego de que al menos siete efectivos militares perdieran la vida en los combates contra el décimo frente de las disidencias de las Farc, al parecer la cúpula militar chavista ha instruido aumentar la capacidad de fuego y vigilancia en la zona.
El MI-35 es una aeronave artillada construida por la empresa rusa Rostvertol y diseñada para diversidad de misiones, principalmente el ataque aéreo para apoyar a operativos en tierra y el transporte de tropas.
Según detalló Airforce Technology, “en 2005, Venezuela firmó dos contratos con Rosoboronexport por ocho helicópteros Mi-35M. Los helicópteros que fueron entregados a Venezuela fueron equipados con motores VK-2500 para operaciones a gran altitud”.
Por si fuera poco, un uniformado de la División de Operaciones de Tecnologías Estratégicas (Dote), adscrita a las Fuerzas de Acciones Especiales (Faes), protagoniza la fotografía. Resulta curioso que la cúpula militar chavista prefiere el empleo de este tipo de cuerpos armados en lugar del personal ordinario de las Fuerzas Armadas.
Los combates continúan en La Victoria, El Ripial y otras comunidades fronterizas, donde algunas células de las Farc se habrían deslindado de “Iván Márquez” y “Jesús Santrich”, para acatar solo las órdenes de “Gentil Duarte”.